¿Cómo puede un proyecto dar un giro de 180ª en apenas seis meses? ¿Cómo se puede pasar del mayor de los terrores cinematográficos a la mayor de las sorpresas? He sido quizás el mayor de los escépticos con esta adaptación desde el primer día que se anunció su rodaje. El nombre de los Wachowski no me indicaba nada bueno, más allá de objeto de mofa y burla hacia los creadores de esos dos atentados contra el celuloide que son “Matrix Reloaded” y “Matrix Revolutions” (gracias a Dios, apenas hay nadie que se acuerde de estas dos “películas”, dos años después de su estreno). Esto unido a la misteriosa deserción del que iba a ser el protagonista, a las declaraciones de Alan Moore en su día y al retraso del estreno que sufrió el film supuestamente debido a los atentados de Londres (mi mente calenturienta siempre lo achacó a la mala calidad del mismo), no indicaban nada halagüeño.

Porque tras ver “V de Vendetta” y haber leído el comic (es necesario haber leído el comic para entender toda la GRANDEZA de la película que no para entenderla), lo primero que se exclama al salir de la sala es: “Lo han conseguido, los jodidos wachowsky, con Laura a la cabeza, lo han hecho”. “Han adaptado a la perfección uno de las noveles gráficas más difíciles de extrapolar a la gran pantalla y no sólo lo han hecho con gran maestría, sino que han ampliado el universo de V”. Sé lo que os estaréis preguntando, la pregunta interesante es Como y no Qué.

Lo primero que se puede decir de “V de Vendetta” es que es una película valiente, incluso a contracorriente del cine de grandes presupuestos de Hollywood, y todo aquel que se haya leído la novela debería afrontar el visionado de la película afrontando y sabiendo de antemano que hay pasajes y momentos determinados que se ven eliminados a favor del brío cinematográfico, pero que respeta enteramente el espíritu que impregnó a su obra Moore. Puestos en aviso sobre estos pequeños detalles comencemos.

El comienzo de la película es demasiado abrupto, parece que se haya querido impresionar al espectador a través de los ojos desde le primer fotograma, en menos de 20 minutos, se ha avanzado demasiado en la trama y en las acciones terroristas de V, sin apenas establecer relaciones más que las necesarias entre los dos personajes principales, lo cual es un craso error, ya que uno de los pilares principales donde la trama debería sustentarse es en la relación entre ellos, pero más adelante es subsanado.
A partir de entonces, es cuando el tono de la película se serena y empieza a dar lecciones de cine, más allá de las explosiones, del carisma de V o de la espectacular puesta en escena.

Los Wachowsky no describen un Londres oscuro, apocalíptico y nauseabundo tal cual hiciera Moore, sino que dibujan un Londres prácticamente igual al que existe en nuestros días, salvo que se encuentra subyugado bajo el brazo opresor de un partido tiránico y de un líder enérgico, que tiene atemorizada a la población mediante manipulación informativa e ideológica, convirtiendo al pueblo en un simple ente habitante sin apenas capacidad pensante (atención que empiezan los aterradores parecidos con respecto a la sociedad actual). Hay introducidos sutiles cambios en el guión que "actualizan" la historia a nuestros días, Evey Hammond, ya no se mantiene una relación sentimental cualquiera como hacía en la novela, sino que se refugia bajo los brazos de un presentador de la televisión homosexual que será brutalmente ajusticiado tras una divertida sátira hacia el presidente del "gobierno (la evolución lógica a los numerosos despidos de la era Berlusconi a varios humoristas por ironizar sobre el jefe del gobierno italiano?).
La película siempre muestra a una sociedad acomplejada y aburguesada, a la que no le importa nada de lo que sucede en el mundo, a la que no le importa perder sus derechos como ciudadano, mientrás se sienta protegida en su propio hogar, en cierta manera esta teoría ya se vio explicada en el primer "Matrix", preferimos vivir en nuestra propio mundo imaginario creado o enfrentarnos a la cruel realidad?
Mucha atención a todos los recursos del gobierno autoritario de la película, que no distan mucho de los que algunos usan en la actualidad.

Quizás el más brutal de los paralelismos creado por los Wachowsky, con nuestros días que se haya incluído en la película es toda la subtrama de Stephen Rea, con un terrorífico parecido a algunas de las teorías conspiranoicas del 11 S. Cuando me puse a darle vueltas, no me creía que hubieran llegado tan lejos con las afirmaciones que se vierten "muy sutilmente" en la película. Desde luego, maximizado a la enésima potencia, pero el parecido con aquellos fatídicos hechos y los posteriores actos ocasionados de la política Bush son asombrosos.

En cuanto a lo plenamente fílmico, pues muy buena narración, momentos que te encogen el corazón y espectacularmente bien dirigidos como esa "biografía a través de la pared" mediante el uso brillante de flashbacks. No hay palabras para describir a Hugo Weaving y su utilización de la voz como "V", sí que las hay, en cambio" para definir la mediocre interpretación de Natalie Portman, a todas luces un error tremendo de casting, como quizás Stephen Rea, que no sabe muy bien que papel está interpretando... Gran Banda sonora de Dario Marinelli, y un par de peros, como son una subtrama política que está muy mal desarrollado y es demasiado facilona y tópica y una "visualización" de lo que va a suceder casi al final de la película por parte del personaje de Stephen Rea, que le quita efectismo al verdadero climax de la película. Son detalles que se les perdona, pero que apartan a la película de la perfección absoluta como adaptación o como nueva visión de la obra de Alan Moore, que es realmente de lo que se trata.

Ya que me han pedido la opinión, la pongo