El Señor de Bembibre (1844) de Enrique Gil y Carrasco.
Clásico del género de caballerías español, ubicado en mi tierra (El Bierzo) y con todas las características del género: un amor imposible, de carácter puro, exaltado y melancólico; una peculiar sensibilidad por la captación poética ambiental (lagos, bosques y montañas); batallas, conjuras y una trama con héroes y villanos de trazo grueso (los primeros, la Orden del Temple; los segundos, el Conde Lemos y todos los que pretendían la extinción de los primeros) etc
La novela está muy bien, muy bien escrita, evocadora, con ajustado final y personajes tan prototípicos como deliciosos a su antigua usanza. Supongo que también ayuda, en mi caso, ir descubriendo lugares (pueblos, castillos, iglesias, monasterios, minas de oro y otros restos romanos y paisajes…) los lugares que conozco personalmente… le añade un plus de implicación personal que los lectores de otros lugares no podrán disfrutar. Aunque claro, por mi parte, recomiendo a todos visitar mi (bonita) comarca

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