Hace tres años compré un televisor panorámico Philips Píxel Plus de 32", desde nuevo se apagaba esporádicamente y volvía a encenderse de inmediato, lo comenté al comercio que me lo vendió y me sugirieron que, si pasaba sólo de vez en cuando, quizá fuera una bajada de tensión en la red eléctrica y que se lo comunicara si lo hacía más a menudo; como en mi zona hay muchas fluctuaciones de electricidad, di la respuesta por buena, pese a que siguió pasando de vez en cuando.
Esos apagones con reencidido inmediato se fueron haciendo más habituales, aunque ya fuera de garantía (entonces era un año), al principio no era preocupante, pero últimamente podía pasarse cinco minutos con apagados-encendidos compulsivos.
También, desde hace una año o más, se le veían unas líneas horizontales curvadas, de color rojizo, que se notaban más cuanto más oscura era la imagen, éstas se fueron intensificando.
Hace pocos meses empecé a notar una raya vertical que parecía una mancha, justo en el centro de la pantalla, de color negro, intenté limpiarla, pero no había manera, estaba por dentro.
Ante tanto fallo, llamé al servicio técnico de Philips, quienes se han llevado hoy el televisor diciéndome que era el tubo de imagen, que por si solo valía unos 300 euros (el televisor nuevo costaba 1800 euros), pero que quizá la marca me hiciera un descueto debido a lo nuevo que era y a la magnitud de la avería.
Bueno, ya os contaré cómo acaba la cosa, si son menos de 500 euros y queda como nuevo me daré por satisfecho, ya que no me apetece gastarme más de mil euros en otro cuando hace tan poco que lo compré, además, ¿compro uno bueno o uno para ir tirando?, ya no sé qué es peor, pues no me fío ni de unos ni de otros, pero al menos los baratos los tiras y compras otro, cosa que con una caro da más pena; tampoco me gustaría comprar a estas alturas uno de tubo, sino uno plano, y eso ya es un mínimo de dinero considerable.