Película maldita desde su periodo de post-producción debido a la escena (de un supuesto maltrato hacia el animal protagonista) filtrada por TMZ en las redes y que corrió como la pólvora. Parecía que salía directamente a vídeo pero al final se terminó estrenando meses más tarde en nuestro país. Yo la he visto recientemente en Movistar+ Estrenos.
Personalmente me ha dejado un tanto frío y ha constituido una pequeña decepción. Mi mayor problema es que solo logro empatizar con la primera historia (y su prologanción en el ultimo acto), ya que el resto de reencarnaciones en la parte central del filme son fugaces y al menos a mí me resulta complicado emocionarme del modo que la película (y el best-seller literario en el que se basa) pretende. Hallström ya ha demostrado ser un maestro en estas lides y su forma de rodar sigue vigente aquí, incluída la música de la británica Rachel Portman, que ya compuso aquella preciosa melodía para "Las Normas de la casa de la sidra".
No me considero animalista (en el sentido más amplio de la palabra) pero sí tengo amor por los animales desde mi infancia. Mi abuelo (QEPD) tenía una pequeña granja y yo ayudaba en ella durante las vacaciones de colegio. Quizás por ello empatizo tanto con el primer y ultimo acto del filme, distanciándome más de las historias intermedias. Su estilo, más rural y menos urbanita, le otorgan sabor a clásico, como ya ocurría con otras películas de los 90 como "De vuelta a casa:un viaje increíble" y "Babe: el cerdito valiente". Ambas continuan emocionándome a mis 33 años de edad, al igual que lo hizo Hachiko (también de Hallström) hace ya casi una década.