Secuela innecesaria porque el final del tercer episodio de esta saga fue perfecto y esta película no le llega ni de cerca, de hecho parece un capitulo mas de esos especiales como el de halloween o el de los dinosaurios en buena parte del metraje.
Y los personajes ya no parecen juguetes, pero no solo por el estilo de animación moderno que hace que los juguetes pierdan esa graciosa torpeza en sus movimientos que tenian en las otras peliculas, si no también en sus personalidades, en especial en la del protagonista Woody, un vaquero que siempre se caracterizo por su valentía y fidelidad es reducido aun personaje miedoso y olvidadizo de su propósito, ser un ¡JU-GUE-TE!, como muchas veces se lo dijo a Buzz en la primera entrega, a Jessie en la segunda y a todos juntos en la tercera cuando estuvieron en Sunnyside.
¿y el motivo de ese cambio? primero, pasar unas semanas guardado en un closet, cuando en la tercera película no tuvo dudas de su propósito después de pasar años guardado en un baúl o en su disposición de pasar muchos años mas en el ático hasta que Andy tuviera hijos, aqui con solo unas contadas veces en las que bonnie no juega con el ya le entra la crisis existencial, y segundo, la aparición y exagerado protagonismo de un personaje olvidado y terciario como la muñeca Bo, un obvio y forzadisimo intento de seguir metiendo al feminismo en las películas nuevas o sagas viejas a como de lugar sin importar que con eso se carguen la lógica de una saga que se construyo durante 20 años, con la aparición de ella a Woody le basta para dejar de ser ese "amigo fiel" a su dueño y convertirse en el nuevo "accesorio" de Bo, ella misma lo llama así.
De Buzz y los demás ¿que hay que hablar?, casi nada, porque es como si no existieran, y parece que para el director de esta película Buzz quedo con algún daño después de que lo resetearon en la tercera porque en esta entrega es tan tarado que no entiende siquiera a woody cuando le habla sobre la voz interior, nada que ver con el Buzz de la primera película que tuvo aquellos momentos de reflexión cuando se dio cuenta de que no era ningún guardián espacial.
Lo único que me agradó de esta película fue la historia de Forky, al principio, por que luego casi que desaparece para darle toda la pantalla a la super pastorcita de porcelana que con un brazo roto hace mas piruetas que Woody en toda la saga, los 20 minutos en los que Forky y su deseo de ser una basura fueron protagonistas me sacaron algunas risas y la llegada a la tienda de antigüedades con esos muñecos antiguos iba interesante hasta que todo se va al traste.
En fin, una película que al principio iba como un 7/10 poco a poco se convierte en un 4/10, solo por pura nostalgia no le doy menos y estoy seguro que no quedara en mi memoria, no como la TRILOGÍA de Toy Story.