Creo fue el último tirón, aquel con el que la chica se hunde definitivamente.
Curioso ver que tanto el mal funcionamiento del tiburón mecánico, como la actitud imprevisible del tiburón real que aparece en la parte final del la película fueron cruciales para determinar el desarrollo de la historia.
En el primer caso obligó a cambiar la forma de enfocar las apariciones del animal (tanto el ataque a la chica, como a un pescador, como al niño de la playa iban a ser con el tiburón perfectamente visible) y en el segundo caso, porque hizo que se variase el destino que iba a sufrír el personaje de Hooper.