Soderbergh se está "retirando" cada dos por tres. No caerá esa breva.
Volviendo a Gilliam, yo, por contra, creo que sí querría hacer taquillazos, pero en su "territorio". Ponle a Terry un micro delante durante más de 15 minutos y verás cómo vuelve a decir que J.K. Rowling lo quería a él para dirigir los "Harry Potter" hasta que vino alguien de Warner y vetó su nombre. Y probablemente será cierto.
Pero la carrera de Gilliam está plagada de ironías: no deja de ser curioso que su, en su momento, vilipendiada "El secreto de los hermanos Grimm" se haya convertido diez años después en el modelo para el blockbuster de fantasía, desde las "Blancanieves" hasta los "Hansel y Gretel" y todo el alegre montón.