Intenté ver tres veces esta película durante diferentes momentos de mi vida pero siempre se me atragantaba. Esta vez si que he podido verla entera y bueno, qué decir. No es una película de acción más, ya solo por la ambición del que está detrás de las cámaras se percibe como algo distinto. Ese tono grisáceo y oscuro que inunda todo el film, los maravillosos juegos de luces y sombras que hay en ciertos momentos o el arte que tiene Gareth Evans moviendo la cámara, la dotan de una personalidad que no tienen la gran mayoría. Esto es algo que no se le debería exigir a una película de este tipo que normalmente tiene todas las papeletas para ir directa a vídeo (merecidamente digo, no como esta), pero aquí hay algo más.

El guión es lo que es, exactamente el mismo que en 'Dredd', cambiando algunos matices. Ambos guiones funcionan a la perfección, cumplen lo único que intentan: entretener a mansalva. Se permite el lujo de meter ahí una trama familiar que le da cierta salsa a la trama, que acaba haciéndose un poco repetitiva de solo ver a asiáticos repartiendo hostias. También toca el tema de la corrupción policial, que en Indonesia debe estar a la orden del día e imagino que esta película crítica bastante ese aspecto del país.

Pero no hay ninguna duda de que cuando mejor funciona esta película es cuando se reparten hostias. Los coreografos se merecen un diez. Las peleas son dinámicas, trepidantes y capaces de reinventarse una vez tras otra. Cuando solo disparan a mansalva, no mola demasiado. Pero cuando las artes marciales salen a relucir, es una gozada tras otra. Ambas escenas de pasillo tienen que estar entre las diez mejores escenas del cine de acción que ha habido nunca, junto con la de 'OldBoy'. Espectacular es quedarse corto, y toda la película es una espiral de hostias, contraataques, bloqueos y patadas que no sabes ni de donde han salido.

Una gozada que va perdiendo a medida que pasan los minutos y que cuenta con unos actores protagonistas muy mediocres y sin carisma (todos son clones, excepto el protagonista), pero que en ningún momento deja de ser una de las mejores propuestas que ha dado el cine de acción. Entre esta y 'John Wick', los fans (y no fans) del género estamos bien servidos.

Un 7.