Yo creo que la clave no es hacerla oscura, sino hacerla bien. Parece como si en todas las películas de super héroes o ciencia ficción, oscuro=bueno, y no siempre es así: "Spider-man 3" es más oscura que las otras 2, pero es mala.
Por otro lado, Spider-man, como Superman, son personajes luminosos, enérgicos y positivos. Hay que ser fiel a la esencia del personaje.
Eso no quita para que haya alguna trama oscura que afecte al personaje. La del traje-simbionte negro era una gran oportunidad, pero Raimi la cagó y en vez del lado oscuro nos mostró el lado tonto de Peter Parker. Mucho mejor el Superman malo de la III (por mala que sea la película), pero después de desaparecer, el personaje vuelve a su esencia: ese plano inolvidable de Kent abriéndose la camisa al son de John Williams.