Por gusto personal, pero también por motivos económicos. Veo más en mérito lograr continuadamente tantos éxitos, que en conseguir dos éxitos brutales pero muy espaciados en el tiempo. Sin ir más lejos, la última de Spielberg, un biopic dramático acerca del presidente probablemente más famoso de la historia de EEUU ha hecho 182 millones en su país, lo cual me parece tremendo. Este tío toca todos los palos y en todos triunfa (independiéntemente de que la película nos guste más o menos).