Que Routh se parezca "en exceso" a Reeve no es malo ni bueno, es simplemente un ejemplo de como se ha apostado por la comodidad antes que por el riesgo, de como un actor joven ha realizado un preciso trabajo de mimetización en lugar de dar un toque personal al personaje.
El problema no radica en que si te gustó la película original te gustará esta, o viceversa, es que como largometraje no aporta básicamente nada. El trabajo de personajes es muy limitado, y los guionistas sacan y esconden cartas según conveniencia.
Pero vamos, que queda poco para que se pueda opinar abiertamente.
Saludos