De buenas a primeras me desagrada el casting, esperemos que el Routh sea algo más expresivo que una patata. Pero me ha llamado la atención ese ligero tono melancólico/épico presente en la película de Donner y que parece que aquí también va a ser importante. Ese es un punto a favor.
Por otra parte, lo del traje no tiene solución. Ahora más que nunca, con tanto azul, parece un pijama. La S es ridícula!!!