Dios santo bendito. Menudo desastre.

Dirección de actores nefasta, narrativamente inane (las aventuras de baby leia y obi wan podrían haber dado para mucho, un cruce entre la Amblin ochentera y Star Wars lleno de aventuras, sense of wonder y emoción, pero para eso, no sé, supongo que hace falta gente COMPETENTE, por no hablar de las líneas de diálogo), visualmente anodina (es indistinguible del Mandaloriano o Boba Fett, por ejemplo), e incluso un tanto cutre, lo cual en esta ocasión resulta un pecado aún mayor dado que pretende tomar al Episodio II como claro referente a este respecto.

A nivel formal, un dislate. La secuencia a modo de prólogo -que no transmite nada y sobre el papel es tremendamente importante- tras el flashback precuelero esta dirigida como los perros, y luego posteriormente se mantiene en la mediocridad más absoluta. No hay tensión, no hay sentido real de amenaza o peligro, no hay un uso dramático o narrativo de la puesta en escena. No hay NADA. La secuencia de acción central de ambos episodios y la del cierre del segundo episodio son atentados a la planificación y la composición.

Y luego la música. La jodida música. El tema de Williams es excelente (menuda sorpresa), pero está usado poco y mal. Dado que este serial pretende imbricar a tope con la etapa lucasiana, referenciar material temático de Williams parece de lo más pertinente, pero ni siquiera atinan a emplear el tema de la fuerza donde obviamente tendría todo el sentido su uso (no hago spoilers). Y la música original... loops de percusión y samplers de librería "a lo Star Wars".

Una vergüenza.


En fin, para qué seguir comentando. Seguiré viéndola por Ewan y Hayden, claro, y porque el marco temporal y el contexto narrativo son tan potentes que me parecería inaudito que algún episodio posterior no contuviese al menos un gran momento.

Pero todo es posible, visto lo visto.