
Iniciado por
Sisifo2
Grant y Achilipú, lo que pasa es que vuestra argumentación es muy simplista, muy minimal y un tanto distorsionada, pero no se corresponde con la realidad de lo que hay en la cabeza de los espectadores de este cine ni de la fuente exacta de nuestro agrado ante la experiencia de ver estos films. Vamos, es como si me tratais de vender que si te gusta el cine de tiros es que disfrutas viendo ver matar gente a balazos, o que si te gusta el llamado "cine social" disfrutas mirando a los pobres. Creo que no se trata de eso.
No lo digo por vosotros, pero en lo personal lo cierto es que me toca muchos los cojones cuando oigo que los espectadores que opinamos que "Las colinas tienen ojos" está muy bien y que "Saw" mola mucho "disfrutamos viendo torturas", casi nos ponen de enfermos mentales, tarados o sádicos. Genial, pues muchas gracias por pensar eso de mí. También me choca muchísimo cada vez que leo el topicazo de que estas películas no tratan de nada y que las muertes y torturas son porque sí, sin "fondo argumental" o gratuitas. No sé si de verdad hemos visto las mismas peliculas, pero yo si quieres te cuento de que trata "Hostel", y me parece más que obvio que hay base argumental y que las torturas son por algo. Otra cosa es la crítica o análisis que hagas de ello, eso ya es diferente y aceptable, pero vamos, la mentira no, no le veo razón de ser.
Pienso que sobre todo esto no hay más que una hermosa colección de clichés que cuando a ti no te gustan estas peliculas puedes abrazar sin ningún tipo de prevención (además, es políticamente correcto). Como que si te gusta Nirvana eres un suicida o tienes problemas psicológicos, claro, algo que solo podría pensar alguien... al que no le gusta Nirvana. Pero habría que molestarse un poquito en pensar en la mayoría inmensa de espectadores que adoramos este género y que incluso nos gustan estas peliculas duras y preguntarse porqué es así. A ver si va a ser precisamente por lo contrario de lo que decís: a mí de hecho me gusta "Hostel" por lo que hay detrás, no por la tortura en sí. Y si quieres te la cuento (señal de que tiene argumento) y hasta te la razono, y hasta da para un ensayo sobre la fragilidad de la vida, la impredicibilidad del horror en lo cotidiano, y hasta te cito a Dostoyeski y lo hago con suficiente habilidad como para que parezca que tiene que ver (que de hecho tiene que ver). Vale que también yo soy un pequeño monstruo de la retórica, pero es que está ahí, y el que lo vea que lo vea, y el que no a otra cosa. Pero por favor un respeto.