Es que una cosa es ser llamado y otra muy distinta ser elegido. La distancia entre Recuerdos y 8 1/2 es grande, como también lo es entre Celebrity y La dolce vita, y en todo caso el parentesco es temático, porque se trata de un estilo difícil de mimetizar. En todo caso, hay que reconocerle a Woody mantener encendida la llama de la admiración por maestros del cine europeo que, mal que nos pese, han desaparecido hace ya tiempo de la mente cinéfila colectiva.