Claro que sí, es algo fantástico. Pero yo suelo decir (y este es mi patrón para medir la mayoría de las producciones creativas del espíritu humano -hay que ver qué pedante me ha quedado éso -), que el arte (una pintura, una película, una novela...), no tiene por qué ser realista, pero debe ser verosímil. Y hay momentos en que el traje y el batmóvil del Batman de Burton no son verosímiles (o no todo lo verosímiles que sería de desear).
Los Bat-trajes y el Batmóvil de Nolan también me gustan mucho, no lo voy a negar (aunque sé que no le tienes mucha simpatía al Tumbler). Se nota que están muy trabajados: te crees que alguien se podría poner algo así para combatir criminales (y de hecho creo que en la película llegan a decir que era un prototipo destinado a soldados del ejército pero que no lo llegaron a fabricar en serie porque resultaba muy caro). Es el enfoque realista, de cine de detectives casi, que da Nolan a su Batman, pese a lo cual, también tiene momentos formalmente estilizados y hasta algo fantásticos.