He llamado al hotel, y le he preguntado al encargado si no le importa que cuando lleguemos hagamos un unboxing de rambos en su recepción.
Me ha dicho que no tiene nada contra las preferencias sexuales de cada cual y tal, pero que esas cosas mejor las hagamos en una habitación. Le he insistido, y le explicado que no es lo que parece, que simplemente se trata de sacarnos allí en la recepción unos rambos de 30 cms.
Me ha colgado.
Espero que en granada no sea todo el mundo así.