Hace tiempo algunos recordareis que presenté en este mismo hilo una TV CRT (de tubo vamos, las de toda la vida.), que había adquirido de potra. La TV básicamente la quería para poder jugar con las consolas y placas arcade clásicas que poseo.
También comenté que, aunque había quedado satisfecho, posiblemente no iba a ser mi TV de tubo definitiva, ya que buscaba un modelo algo más moderno, y aquella, a pesar de ofrecer muy buena calidad de imagen, carecía de ciertas funciones y conexiones para mí importantes, además de tener un diseño algo anticuado.
Sigo buscando todavía ese modelo en concreto, una de las últimas TV de tubo de 14" que Sony fabricó. Pero son caras y difíciles de encontrar en buen estado.
Mientras, el destino quiso que esta semana me diera por acercarme a un Cash, y para mi sorpresa me encontré con que tenían a la venta una Sony Trinitron de 14", concretamente el modelo KV-14M1E en un estado excepcional, conservando incluso el mando a distancia original sin apenas golpes ni signos de desgaste, algo raro de ver...
No es exactamente el modelo que busco, pero es más moderna que la que tengo actualmente. Tras pedirle al patán del dependiente que me la mostrara, y tras comprobar que el tubo de imagen estaba en buen estado y que aceptaba la señal RGB correctamente, decidí sin vacilar llevármela para casa (otro trasto más... ). Además, resulta que era el día sin IVA, así que me salió regalada.
Es difícil encontrar en estos establecimientos TV´s de tubo en buen estado, y más Sony Trinitron, que son las más demandadas. Así que cuando se presenta una oportunidad como esta, no hay que dejarla escapar. No hace mucho trajeron en este mismo Cash una Loewe de 21", y por pensármelo tanto me quedé sin ella... Si las Sony Trinitron eran las "Mercedes" de las TV de tubo, las Loewe eran entonces las "Rolls Royce". Teles que en su día eran caras de cojones, pero con una calidad "made in Germany" acojonante... La calidad de imagen que proporcionan por RGB esas TV es impresionante.
Bueno, tras dejarme los brazos para traerla a casa (es de 14", pero tras un buen rato con ella parecía ser de 32"...), lo primero que hice fue desmontarla y darle un poco con la brocha. Aunque la TV exteriormente estaba impecable, excepto por unos arañazos sospechosos en la parte trasera que parecen bastante recientes, seguramente provocados por los mismo empleados de la tienda, es interiormente donde se nota el paso de los años.
Hay que tener en cuenta que este modelo en concreto se fabricó (en España por cierto) entre los años 1996/97, así que cuenta ya con unos 20 añitos. Por el estado en el que se encuentra diría que alguien la ha tenido o bien guardada todo este tiempo o puesta en alguna repisa muerta de asco.
Y viendo el interior posiblemente sea lo primero... Apenas había porqueria, nada que ver con la otra que tengo, que cuando la desmonté se me cayó el alma al suelo... dos dedos de mierda, y no exagero.
La dejamos bien limpita... Mucho OJO con manipular por dentro una TV de estas. A pesar de estar desconectadas, dentro del tubo conservan todavía una carga eléctrica que puede ser MORTAL, así que NADA de TOCAR si no se sabe lo que se hace...
La montamos de nuevo y le damos con un trapo y limpia cristales, que para el plástico es mano de santo. Está en muy buen estado, así que apenas hay que liarse con ella. La parte trasera la meto en la ducha, y la limpio a conciencia. El mando se desmonta y la placa se limpia con KH7, el resto con Fairy y como nuevo...
Tras un buen rato, la TV parece recién salida de fábrica...
Es muy bonita, con las formas más cuadriculadas y angulosas que la que tengo ahora, que es más antigua. Recuerda a los antiguos monitores CRT que usaban los PC.
Este modelo ya dispone de entrada RCA y entrada para cascos. Por supuesto en la parte trasera nos encontramos con el tan ansiado euroconector (scart), compatible con la señal RGB.
Aunque en la tienda ya la había probado, tocaba ver como se desenvolvía con señales NTSC a 60hz. Para eso, primero he optado por conectarle una de las placas arcades Jamma que poseo. Estas placas sacan una señal RGB pura, de mucha más calidad que las que ofrecen las consolas.
Es un poco engorroso por la cantidad de trastos que hay que conectar... Pero una vez montado el "chiringuito", empezamos ya a meterle caña al televisor.
La placa elegida es ni más ni menos que la de uno de mis juegos favoritos de todos los tiempos. El grandioso Final Fight de Capcom. De chaval pasaba más tiempo en los salones recreativos que en mi casa, y en esta máquina en concreto me dejaba toda la semanada que me daban mis padres...
La placa es una Capcom CPS-1 original, versión USA. Por muchas conversiones que se hagan para consola, emuladores en PC... no hay nada que pueda igualar el feeling que transmite el jugar con el arcade original. Otro mundo...
Sin ajustes ni nada, ya se puede observar que la imagen que proporciona por RGB es soberbia, increíble... Las fotos no le hacen justicia, en vivo se ve espectacular.
Cody, Guy, Haggar... los infames Punkis, Andore... los pelos de punta. Cuantos recuerdos...
Tras unos pequeños ajustes con los correctores RGB, consigo dejar la imagen perfecta, mejor que la de mi otra TV, que ya era de por sí excelente. Noto, eso sí, que cuando la pantalla se muestra oscura se puede observar en una esquina una pequeña fuga de luz... espero que no sea nada importante. El sonido, a pesar de ser monoaural, es bastante bueno, aunque juraría que mi otra TV se escucha algo mejor.
Por desgracia esta TV no dispone de la opción para corregir el desajuste de la geometría de la imagen que provoca la señal RGB. Con las señales PAL no hay problema, pero cuando ésta es NTSC, la imagen se descentra de la pantalla. No es algo muy exagerado, ni tampoco es que impida jugar, pero está ahí... Los últimos modelos que sacó Sony ya disponían de esa opción.
Ahora probamos con una consola. Mi querida Sega Saturn, con uno de los mejores juegos que cuenta en su catálogo. El Guardian Heroes de Treasure. Por supuesto versión japonesa, 60hz y pantalla completa.
Se ve de fábula... color, contraste... Podéis observar como la imagen queda desplazada hacia la izquierda. En los modelos más modernos se podía regular mediante un parámetro en el menú, con este modelo en concreto tendré que meterme en el menú de servicio y probar, con el riesgo que conlleva eso...
Este juego es la caña, muy divertido y con una apartado técnico brutal. Como digo de lo mejorcito que se puede jugar en la 32 bits de Sega.
Seguiremos haciendo pruebas, pero de momento muy contento. No es exactamente lo que buscaba, pero se le acerca. El tamaño es el ideal para mi cuarto, aunque una de 21" seria lo suyo claro, pero ya son demasiado trasto.
No es que juegue mucho a las clásicas, pero cuando de vez en cuando me da por ello, pues me apetece hacerlo en las mejores condiciones posibles, y cuando hablamos de consolas y ordenadores antiguos, eso sólo se puede conseguir de una manera; con un buen CRT.
Color, contraste brutal, velocidad de refresco, intensidad de los negros, y los benditos scanlines... Es que no hay color.
Los que tenemos ya una cierta edad y vivimos aquellos tiempos gloriosos sabemos apreciar estas cosas. Hay quien me dice que donde voy con estos trastos, que ya no valen absolutamente para nada... Se me escapa una sonrisilla cada vez que lo oigo.
Y es que, mi amor por las "culonas", será siempre eterno.