Amén a todo el razonamiento de Abuelo Igor. Es cierto. Wilder miraba mucho por los billetes, pero ten en cuenta que fue guionista antes de director, y actor antes que guionista. Imagino que vio mucho dinero pasar por delante de sus narices, y por detrás también. Cuando quiso dirigir, no solo buscaba independencia, sino también pasta, como buen judío.

Interesante también la utilización de la palabra autor, como bien señala LORDD. Siempre se ha contrapuesto el director de cine de estudio, el que era un mandado, con aquel que adquiría independencia y tenía posibilidad de meter mano.
Pero salvo en esas circunstancias, estoy de acuerdo en que autor puede que no sea nadie, o puede que sean todos, en mayor o menor medida. Otra cosa es que, como autor, nos guste su propuesta. Pero eso es otra historia.