Tema: ¿Qué ha pasado en Cinesa La Maquinista?

Iniciado por invo

Entre que la figura del acomodador desapareció hace años y que las entradas ya se venden en muchos casos por internet auguro un negro futuro: las bolsas de palomitas las venderán en máquinas expendedoras para que te las calientes tú mismo en los microondas que habrá en los pasillos del cine y los espectadores tendrán que sortearse a "piedra, papel o tijera" quien de ellos sube a la sala de proyección "a darle al play" a la película... Ah, y al acabar la película, el último que salga de la sala que apague la luz

Pues no vas muy desencaminado ya que prácticamente no deben quedar proyeccionistas en cines, al ser todo digital puede ir todo programado, pero si falla pues a esperar a que suba el encargado "cualificado". Los jefes contentos porque se ahorran los sueldos de los de cabina, los clientes resoplan en la sala porque la película empieza con muchos minutos de retraso, y los empleados a resolver el problema si pueden.

Hombre, si las pelis se proyectan siguiendo un horario programado digitalmente, pues precisamente no habrá retrasos (salvo que haya problemas, claro).

Por cierto, hablando de "automatizar" los cines, os dejais el personal de limpieza. Pero tranquilos, seguro que serán facilmente subtituibles por robots tipo Roomba pero más potentes (para que pueda "tragar" los vasos o cajas de palomitas) y que pasarán por debajo de las butacas, de arriba para abajo.

Hace ya muchos años que los cines perdieron la eséncia y el encanto de antaño,las multisalas tienen gran parte de culpa y la mala educación de la gente la otra parte.

No toda la gente, pero sí, gran parte.

Me encontre con ese poltergeist cuando fui a La Maquinista a ver Guardians of the galaxy. Había quedado con un amigo en las taquillas. Llegué el primero y ya no había taquillas. Estaba el cine pero no las taquillas. Un momento muy Woody Allen Al final fuimos a preguntar y nos dijeron eso: que ahora se vendían donde las palomitas y demás.

A mi los cines de La Maquinista me gustan, son Cinesa sí, pero al igual que los del Diagonal Mar (ex AMC) no lo son desde el inicio, sino que eran Warner y sus cines siempre me han gustado, por la ambientación, estética y demás (salvo lo de tener las palomitas y demás antes de la entrada, con lo cual si compras algo debes entrar con la entrada en la boca casi ). Lo malo es que la sala THX Lucasfilm (aunque ya hace años que no es de la compañía esa tecnología) ya no está y ha dado paso a otra tecnología.

De todas formas hace ya muchos años que prefiero comprar las entradas por Internet, puedes elegir asiento y fila, evitarte colas etc

Synch

Iniciado por Landis

Hace ya muchos años que los cines perdieron la eséncia y el encanto de antaño,las multisalas tienen gran parte de culpa y la mala educación de la gente la otra parte.

Gracias al ciclo Phenomena, al cual asistí a sus primeras y genuinas sesiones en Barcelona, pude comprobar que ese encanto (del cual apenas dudaba pues tengo 37 y hablamos de hace sólo de unos 15 años desde que empezaron a salir estos centros comerciales) no estaba inflado en mi memoria: los asientos, las cortinas, la situación en pleno centro de una ciudad, el olor de una sala más antigua y, en este caso, una película divertida y una sala llena (dos aspectos que no siempre se daban antes aunque muchas salas solían estar llenas cada fin de semana).

Dicho esto hay algo que si me quedó claro en esas sesiones de 2011-2012: los cines de multisalas son mucho más cómodos. Pero mucho más, no sólo la butaca, sino el hecho de tener las filas escalonadas, sin cabezones por delante, amen de toda la tecnología actual. Y además están mucho más limpias.

No sé, realmente era fascinante ver el cine en esas salas de antes (en mi caso me encantaba pasar de mi ciudad a Los Angeles, nueva York o un mundo fantástico sólo cruzando las puertas y cortinas de la sala) pero lo de ahora también tiene su lado positivo. Lástima del IVA y de esa visión crucial y moderna de quien fijó ese % para la cultura.

Synch

Bueno, lo de la limpieza es discutible. Depende del cine. Recuerdo una proyección en una multisala de éstas en la cual la sala olía a meados. De verdad. Durante toda la película. Me prometí no volver a ese cine y lo he cumplido.

Iniciado por Jane Olsen

Bueno, lo de la limpieza es discutible. Depende del cine. Recuerdo una proyección en una multisala de éstas en la cual la sala olía a meados. De verdad. Durante toda la película. Me prometí no volver a ese cine y lo he cumplido.

Un punto negativo de las multisalas actuales es que todas parecen iguales aunque en eso tiene mucho que ver la cadena que las gestiona. Vivo en BCN pero he ido a los multicines madrileños de Xanadú, Príncipe Pío (esos, por tema arquitectónico, me gusta como los han integrado en la vieja estación) y creo que una vez en La Vaguada. Y si te da un colapso y pierdes la memoria no sabes en que cine estás ni en que ciudad Sin embargo pude catar los cines clásicos (y la mayoría cerrados) de Capitol (ahí vi Las dos torres y El Retorno del Rey), Palacio de la música y alguno más, y todos tenían ese aire retro que tanto me gustaba.

Lo que para mi marca la diferencia es que el cine casi ha desaparecido del centro de la ciudad y para mi eso tenía mucho encanto. No sé como está la cosa ahora en Madrid pero en Barcelona sobreviven unos pocos por el centro. A saber cuanto van a durar.

Synch

Cuando yo era muy, muy pequeña (principios de los ochenta), había varios cines por mi barrio (Morasol, Avenidas, Royal, Juan de Austria, Diego de León, Benlliure, Victoria, Novedades, Cartagena...). A día de hoy, sólo queda el Victoria, y no me pilla excesivamente a mano, ahora es una multisala, además. Todos han desaparecido: muchos databan de los años 50 o antes. Otros se han convertido en diversos locales: Zaras, Gino's y demás, discotecas, salas de fiesta, bingos... De los cines de la Gran Vía, también quedan poquitos, y la mayoría de los más bonitos, hoy son boutiques de H&M, Telefónica y similares, o han vuelto a ser teatros como eran antes (caso del Calderón), o están cerrados y no se sabe muy bien qué va a ser de ellos (Palacio de la Música, que lo compró Caja Madrid, dijo que iba a hacer con él una cosa y ahora resulta que donde dije digo, dije Diego). Las nuevas generaciones ya no van a saber lo que de verdad era ir al cine en uno de esos suntuosos palacios de la imagen, con acomodador, con un ritual casi como el que se seguía en el siglo XIX para ir a la Ópera. Como decía antes alguien, entre las multisalas, lo exagerado de los precios, el mal servicio y lo mal educada que está mucha gente, ir al cine ya no es algo bonito.

Nadie ha superado mi anécdota cuando, al comienzo de "Hace mucho que te quiero", una con Kristin Scott Thomas, casi me caigo entero y verdadero al suelo de la sala. Había cedido el asiento y me quedé agarrado a los brazos de la butaca. Digno de Chaplin.
Y en las mismas salas, Las Monopol de Las Palmas de G.C., ver proyectada sobre una pantalla con unas preciosas manchas de humedad, grasa o yo qué sé "Las vidas de Grace". Me deprimía más ver las manchas que la película, y quien la ha visto sabe a qué me refiero.
O cuando tuve que cambiarme tres veces de asiento porque en los dos que había probado antes el forro estaba tan desgastado o destrozado que tenía unos hermosos sietes...
Y lo triste es que son las únicas salas en esta ciudad que proyectan películas fuera del circuito comercial ordinario, pero en en estas condiciones, como que no. Triste es decirlo.