Pasada la historia principal en la máxima dificultad (me he dejado casi todas las secundarias para hacerlas ahora sin ese ansia de llegar al final), este Spider-Man me ha dejado muy satisfecho. Al principio tenía mis reservas con el balanceo, pero tras unas horas de práctica el sistema se siente complemente natural, basado en físicas (todavía estoy esperando las pruebas de esos que decían que no era así, ¿eh Kikeomer?) pero sin dejar que el "realismo" se interfiera en la fantasía. La simple actividad de ir de un lado a otro es una gozada (se agradece la caza del easter-egg), y ya podemos decir oficialmente que el balanceo de Spider-Man 2 ha sido superado.
El desarrollo cumple, deja espacio para dos o tres secuencias del copón al estilo destroyer de Uncharted, y aunque los jefes no son muchos, los que hay son un espectáculo. La trama abre camino para futuras secuelas; han sabido retorcer de formas nuevas pero respetuosas el lore clásico del personaje, como hiciera Ultimate Spider-Man en los cómics. El juego no olvida nunca que Peter Parker está tras la máscara.
Las comparaciones con los Batman Arkham son inevitables, y es evidente que bebe mucho de aquellos... pero a un nivel superficial (que por cierto, eso del sentido arácnido para esquivar es mucho más antiguo que Arkham Asylum, así que la inspiración es mutua). Lo que más se suele comentar son los combates. A mí los del murciélago me encantan.
Los de Spider-Man son mejores.
Insomniac sabe lo que se hace. Han bordado la agilidad del personaje, y lo más importante: la verticalidad. Batman podía empezar atacando desde el aire, pero una vez en tierra el combate no se despegaba del suelo. La araña es todo lo contrario, el juego te anima a hacer combos aéreos tan largos como sean posibles, y lo hace con una fluidez excepcional (incomprensibles las quejas que leo sobre esto. ¿También os quejáis de Devil May Cry o Bayonetta?). Un poco más sutiles son las diferencias en la respuesta a los mandos. Cuando pulsabas el botón de ataque con Batman, éste se desplazaba rodando por el suelo hasta el enemigo, no importaba la distancia. En Spider-Man hay un botón dedicado a eso, y otro que solo impactará si hay algo sobre lo que impactar. Eso lo cambia TODO. Y por supuesto aquí no tienes contraataques, así que cada pulsación debe ser medida. Es un poco más difícil, pero cuando lo dominas todo (mención especial a la telaraña, que permite despachar enemigos por la vía rápida sin necesidad de agotar su vida) te sientes como el maldito Spider-Man.
Algo que sí copia descaradamente de Arkham, y de lo que se habla mucho menos,Spoiler:
Gráficamente es portentoso, apenas puedo imaginar lo que esta gente se sacará de la manga con el próximo en la siguiente generación. Voy a llenar el disco duro a base de fotos.
Y por último como nota menos positiva, los eventos aleatorios no son nada del otro jueves, aunque se han tomado la molestia de ir iterando y modificando cosillas a medida que la historia progresa. Los coleccionables son también rutinarios, aunque me gusta cómo las mochilas hablan de eventos pasados.
Resumiendo: juegazo. No sé si el mejor de superhéroes de la historia (Arkham City está ahí), pero entra en el Olimpo de los más grandes.