Hoy es un gran día, y amargo al mismo tiempo...
He terminado la réplica en madera del cartel de la posada de El Pony Pisador, y en breves días, partirá hacia su nuevo hogar. Ha sido mucho tiempo trabajando. Muchísimo más del deseado. Aunque sabía que este momento llegaría, cuando dedicas tanto tiempo, esfuerzo e ilusión en una pieza, siempre duele desprenderse de ella.
Un trozito de mí se va para la Península. Es la única en madera que haré, y por ahora, es lo mejor que he hecho...
Que en tu nuevo hogar te luzcan con el mismo cariño que con el que fuiste creada...
Te echaremos de menos en casa...
Gracias!!