Hola chicos.
No consigo salir de mi asombro y sorpresa (sorpresooooón más bien) ante mis primeros contactos con la tecnología OLED.
Bien es cierto que también digo lo mismo tras cerca de diez años sobre una LG de junio del 2012 a 1080p con la cual no me supone ningún inconveniente ver vídeos a 4K sin el más mínimo microparón a través del ordenador, echar unos vicios con sistemas de antaño de 16, 32, 64 y 128 bits, con la cual tras ajustar en distintas ocasiones los diferentes parámetros que por la época ya ofrecía el color negro a malas penas presenta ese grisáceo tan característico del que tanto se comenta sobre el LCD/LED.
Un panel donde el blanco presenta una constante uniformidad y unos brillos que parece que me encuentre ante los faros led de un coche.
Y bueno, las películas descargadas a 4K me hacían incluso en ocasiones replantearme si comprar una nueva pantalla.
Paso pues a una Nano Cell a 4K de septiembre del 2018 con la que todo lo mencionado con la LED a 1080p aumenta más todavía dicha calidad puesto que con ella la profundidad del color es ampliamente sobresaliente así como unos contrastes mucho mayores así como brillo y luminosidad, todo esto tan solo en modo SDR, no describo entonces nada sobre el HDR.
Totalmente contentísimo y siendo el segundo televisor de la marca, éste con una garantía ampliada, finalmente decido sustituír la LED más que nada por emplazarla en otra estancia por retirar a un fantástico panel de plasma a 720p del 2003, por consumo eléctrico hoy día algo elevado y resolución, no por inconvenientes ni averías en el mismo puesto que no ha presentado más que una limpieza de las fajas de conexión hace ya unos cuantos años.
La decisión se me hizo un tanto complicada ¿compleja tal vez? por lo visto como Neo QLED por parte de Samsung, una Nano Cell a 8K por LG y por estar dudando entre si aumentar de las 47" de la LED a las 55" de la OLED o pasar la de 65 de la Nano Cell a mi habitación y poner en su lugar una nueva LED o LED Nano Cell de nuevo en el salón de 80 y tantas pulgadas.
En vista de todos los consejos por parte de algunos compañeros decidí comprar en principio una C1 en 48" por precio, comentándome de que tarde o temprano me arrepentiría de la decisión frente a una en 55, con lo que finalmente la anulé y me decanté por la G1 también como oferta, costándome incluso como la LED del 2012, unos 1.500 euros con reembolso aparte caso de haber mandado todo correctamente a la casa. Pero bueno, ya con todo el avance de una época pasada a la actual como si me hubiera costado 2.000.
La verdad es que es impresionante viendo todo lo que he visto a 1080p con el OLED. Ya lo noté en el nuevo terminal móvil al ser también OLED, pero no suponía que fuera tanto pese a haberlas visto en funcionamiento en centros comerciales.
Es más, ni siquiera los juegos en Pc los he cambiado de resolución 1080p a 4K y en SDR los que por supuesto no vienen con HDR implementado.
Ahora, con el cine igual, y aún me falta toquetear para algunas mejoras.
La siguiente caso de estropearse la Nano a por otra OLED de mayores dimensiones, mader mía lo que da de sí esta tecnología. Increíble.
Bueno, esta ha sido mi primera experiencia poniendo en escena otras magníficas pantallas con las que disfruto de la misma manera, pero cada vez que uso más la OLED más la voy echando en falta al menos con la LED.