De la gala, ¿qué decir? Un horror. Manel Fuentes declamando cada frase como si estuviera haciendo una obra de Arniches, y en vez de hacer uno o dos chistes para las transiciones, se marcó unos monólogos laaargos y aburridos. Los clips de las películas en que se metía (copiado de los Oscar) no tenían gracia ninguna. El número musical un espanto. El realizador a por uvas muchas de las veces. El locutor metió la pata en cosas que es cuestión de prepararse un poco antes (dijo que Vivir es fácil... trata de cuando Lennon fue a rodar una película "a Granada"). El tono quejica y falto de autocrítica de siempre, y lo peor de todo, el feo que les hicieron a los cortos, que los entregaron unos "azafatos" que hasta llevaban publicidad de un patrocinador en la ropa.
La sensación es que se quiere copiar los Oscar sin hacerlo bien.
Lo mejor fue el momento en que Trueba dijo que estaba acostumbrado a perder por ser del Atleti... y pincharon a Enrique Cerezo![]()