Williams, Cuarón, Watson en las tres últimas y poco más, aunque son disfrutables. Por supuesto, son mejores que cualquier cosa perpetrada por Kennedyfilm, eso sí, pero ahí no hay mérito ninguno. Pegarle a un padre con un calcetín sucio con viscosidades generadas por tu propio cuerpo también lo es.
No sé yo si para este viaje necesitas tantas alforjas.