Disfrutar no es lo mismo que entender. Por esa regla de tres, todas las películas te tienen que gustar a la fuerza con tal de que entiendas cuál es su propósito. Por ejemplo, yo también entiendo lo que buscan las películas de Zack Snyder y no por eso me dejan de parecer una mierda (la mayoría, no todas). He repetido lo mismo varias veces ya, y aunque me extraña, yo creo que esto sí que es lo que hay quienes no entienden. Más allá del propósito de la obra, se puede juzgar si para uno tiene sentido, o valor, o si está bien ejecutada, o si es novedosa, o mil cosas más.