Vista.
Es una muy buena película, genialmente dirigida, con una colección de juegos de cámara de todo tipo, a veces a lo De Palma, que consiguen sacar el máximo partido posible a ese escenario interior donde brillan un conjunto de actores soberbios que lo bordan en cada línea de diálogo ideada por Tarantino.
Muy violenta (sangre a borbotones), una trama de película de misterio y perfectamente ambientada.
Eso sí, no es de las que más me gustan de su filmografía y me ha resultado un poquito larga.