Confieso que tengo cierta debilidad por Mulligan, que en las manos adecuadas podría ser la Giulietta Masina de nuestro tiempo, pero, no sé, para mí que la anterior adaptación, de John Schlesinger, con Julie Christie, Terence Stamp y Alan Bates, será difícil de superar. A mí me parece un películón en la mejor línea de superproducción preciosista sesentera a lo David Lean. Peli tan famosa en su momento por detalles de crónica rosa (al parecer Christie y Stamp tuvieron un romance muy sonado en el rodaje) que Ray Davies, de los Kinks, se refirió a ello en la letra de su mítica canción "Waterloo Sunset". "Terry and Julie" eran los actores protagonistas.