La Túnica Sagrada (Henry Koster; 1953)
Revisitada el otro día en HD por canal Hollywood de Movistar, con imagen absolutamente espectacular y un colorido maravilloso (¿a qué esperan en sacar el
BD en España

).
La Túnica Sagrada entra dentro de mi top 10 del cine Bíblico, sin lugar a dudas. Contó con una secuela inmediata:
Demetrius y los Gladiadores, buena secuela, menos bíblica que esta, más péplum, y algo más irregular, aunque también me gusta bastante.
La película tiene dos partes bien diferenciadas: una primera en Jerusalén hasta la crucifixión de Cristo cuando queda "embrujado" el Tribuno Marcelo Gallio tras el contacto con la Túnica; y otra que relata la lucha interior de Marcello, la pesadilla mental en que cae hasta llegar a un punto de esquizofrenia.
Richard Burton hace un trabajo magnífico, interpretando dos papeles distintos dentro de un mismo personaje: observamos la evolución de un tribuno bebedor, mujeriego e irresponsable a otro con remordimientos, pesadillas y una tortura psicológica por la figura de Cristo simbolizada en la Túnica.
Diana, interpretada por Jean Simmons, retrata un personaje dulce e inocente pero también sereno que representa el contrapunto perfecto para el personaje de Marcelo. Por cierto, pocas veces he visto a Jean Simmons tan guapa como en esta película.
Como secundario de lujo, que más bien podría pasar como coprotagonista tenemos el Demetrio de Victor Mature, que para mí está estupendo, nada de sobreactuado como suelen decir de él. Destacaría además el excelente Calígula, interpretado en este caso por Jay Robinson, que retrata un Calígula demente, retorcido y cruel.
El personaje que no me acaba de convencer es el de Pedro de Michael Rennie, aunque no por el actor, sino más bien creo que es problema de guión, puesto que me resulta un poco metido con calzador, y que apenas aporta nada en la historia. Al igual que Tiberio o Pilatos, que simplemente aparecen para hacer avanzar la historia.
Destacaría la oscuridad y el tenebrismo y el tono melancólico de la parte de Jerusalén, muy al estilo de Barrabás; o la escena de las naves en medio de la niebla, el duelo de espadas entre Marcelo y el oficial romano; y la parte final del juicio con esa metáfora del ascenso a los cielos de Marcelo y Diana. Quizá, aunque la película tiene buen ritmo y es entretenida, la parte que menos me gusta es el entreacto, en la búsqueda de Marcelo de la Túnica se hace un poco pesada y además echo en falta más escenas icónicas como si tienen otras películas bíblicas.
La Túnica Sagrada sigue aguantando muy bien el paso del tiempo, me encanta el toque místico y sobrenatural de la película. Para mí sigue siendo de las mejores película bíblicas y que merece la penar tener en nuestra videoteca.
Nota: 8.