Y contestando al siempre incisivo compañero earle, a mí esa narración a través de flashbacks, uno dentro del otro (como en EL MANUSCRITO ENCONTRADO EN ZARAGOZA, libro y película), es una de las mejores bazas de la película, aportando una atmósfera propia a la misma.
Y, como ya comentaba, el trabajo de Bogart es, cuando menos, desganado. Y como bien dices, ni se molesta como otros actores en, al menos, fingir un acento francés.
Pese a todo, el resto del reparto (incluídos los habituales Greenstreet y Lorre) están muy bien. Eso sí, Michele Morgan no tiene un personaje de la suficiente entidad como para equipararse, ni siquiera de lejos, con la maravillosa Ingrid Bergman.
Esta noche he visto otra película muy buena, WATCH ON THE RHINE (1943), con unos colosales Bette Davis y Paul Lukas (Oscar incluído) que espero comentar el lunes a la vuelta de un merecido fin de semana.
