Los fabricantes de electrodomésticos y otros aparatos electrónicos como ordenadores y telefónos móviles no podrán comercializar, a partir del 1 de julio en la Unión Europea, sus productos si incluyen seis sustancias tóxicas concretas. Entre ellas, figuran el plomo, el cromo, el cadmio y el mercurio, en virtud de una nueva ley que los prohíbe porque perjudican la salud.
a pesar de que se podrán seguir vendiendo los aparatos que fueron puestos en el mercado antes de esta fecha, indicaron hoy fuentes comunitarias. El plomo, el cadmio, el mercurio y el cromo hexavalente, así como dos grupos de retardadores bromados de fuego -el bifenilo policlorado y el éter de bifenilo polibromado- son las sustancias que a partir de mañana no podrán incluir aparatos electrodomésticos y otros electrónicos.
Esta disposición se incluye en la directiva sobre restricciones en sustancias de riesgo que fue aprobada en 2003 y que todos los Estados miembros han transpuesto a sus legislaciones nacionales. Entrará en vigor el 1 de julio y afectará a la composición de una amplia gama de aparatos e instrumentos para cuyo uso es necesaria la red eléctrica.