Durante un tiempo salí a libro por año (de hecho, tengo algunos en formato económico) aunque no en orden sino de forma aleatoria, según iba consiguiéndolos prestados. Desde el 2011 no he vuelto a pillar ninguno.
La misma dentadura
carnívora 

que los Aliens y su reina madre. No me extraña que el Ridley le fichara para el universo espacial en el que viven estas criaturas tan
salvajes y
peligrosas
A eso me refería con la división de opiniones a lo que induce lo que uno se encuentra en el Museo. A unos les fascina, y a otros les parece un evento "falto de chicha".
Lo del Pokemon no lo encuentro tan diferente de aquellas quedadas frente a la puerta del cloegio intercambiando cromos revestidas del esfuerzo físico que conlleva una
gymkana. O de aquellas visitas a los parques botánicos para conseguir hojas de cuantas mayores especies vegetales para disponerlas en un mural guiado por tu particular impulso creativo. Es verdad, sin embargo, que todo aquello tenía un fin digamos "más tangible".
Que iba a generar ludopatías era más que evidente, y que iba a suscitar debate, de lo más lógico. Lo que no me esperaba era su sobreexposición en medios informativos, incluso serios, cada dos por tres. Tema éste, y con la que está cayendo, que ha conseguido que mosquee a los menos receptivos (pasa con todo, empezando con el omnipresente fútbol).
Pero casi lo que más me interesa de todo este fenómeno es su impacto económico o bursátil y su habilidad para conectar una vez más la idea consumismo-nostalgia como motor, la eterna adolescencia. Tal vez sea fiel reflejo de una sociedad que, harta de la complejidad y la dureza de la realidad, se refugia en invertir su tiempo en algo sencillo.
Por lo demás, Pokémon representa el lado más industrial, como producto enlatado y hecho en cadena, que puede ofrecer un medio como la animación como gran evento mediático, donde la historia es lo de menos. Su lema principal, "¡Hazte con todos!", yo diría que
pseudo-inconscientemente agita ese espíritu consumista interior puro y duro del que cada uno se tiene que hacer responsable. A este paso los niños van a reclamar su primer móvil a unos imberbes siete añitos influenciados por un entorno del que es complicado escapar para cazar pokémons, hecho que se me antoja inquietante aun cuando puedan estar bajo la tutela de los padres.
Los tiempos cambian y las formas de ocio con él. Estamos en los albores de la prometida gran revolución digital y de la nanotecnología, y como todo progreso va a originar una inercia "creativa destruccionista" (en especial de puestos de trabajo, que unido a la sobremasificación de la población del planeta augura nuevos grandes dilemas).
En todo caso te pasa como a mí, Jane, te sientes extranjera en este mundo en el que naciste con frecuencia. Eso te hace un espíritu libre supongo, aunque tampoco descarto que para ciertas cosas podamos sentirnos algo mayorcetes
Todo debate sereno que se establezca con estas novedades es bienvenido.
PD: creo que B/D ha dicho ya 47 veces en el foro que tiene 47 años

. Lo que lleva a ¿y su composición, Maestro?¿cómo va? ¿no se iba a representar este verano con motivo de alguna festividad en la villa? (a no ser que haya soñado estas condiciones para su debut)
pD 2: borrado por haberlo adivinado Tripley. Además, había errado.