La intensa vida de Marilyn Monroe, su trayectoria en Hollywood y su trágica y temprana muerte constituyen desde luego una de las historias que más atracción despierta entre los cinéfilos de todo el mundo.
No es de extrañar, por lo tanto, el celo de los productores que trabajan en la película biográfica sobre la estrella para cuidar todos y cada uno de los detalles, y por supuesto, para elegir a la actriz idónea que sea capaz de meterse en la piel de la tentación rubia sin desmerecer al icono ni desencantar a su público.
Aunque en un primer lugar la afortunada seleccionada para encarnar a Monroe en la película Blonde fue la australiana Naomi Watts, después de que la actriz (que ya participó en una cinta biográfica interpretando el papel de Lady Di en Diana: su último amor) abandonara el proyecto todo apunta a que la candidata ideal para ponerse el vestido blanco de vuelo es ahora Jessica Chastain.
Al parecer, Chastain se encontraría en estos momento negociando su participación en el proyecto, que dirigirá Andrew Dominik y producirá Brad Pitt. La californiana, cuya carrera en el cine despegó a partir del año 2011 con El árbol de la vida y Criadas y señoras, entre otras películas que le valieron para lograr numerosos premios y reconocimientos, parece encajar perfectamente en el papel por su parecido físico con Marilyn y sobre todo por su talento para la interpretación, que quedó fuera de toda duda después de su trabajo en 2012 en La noche más oscura.
Pese que han corrido ríos de tinta sobre la vida y la muerte de la actriz que encandiló al mundo con su papel en Con faldas y a lo loco, el director de esta nueva película biográfica, Andrew Dominik, quiere mostrar una nueva visión sobre la diva de la interpretación, convirtiendo su vida en un cuento de hadas tras el que se escondía una verdadera pesadilla emocional.