David Gordon Green. O sea, lo esperable. La de 2018 ya era un sincristo. Recuerdo con incredulidad una de las escenas iniciales, cuando van a "entrevistar" a Michael, y se pretende crear tensión de forma absurda planificando la secuencia con el de espaldas, como si el tipo no pudiese dar dos pasos y ponerse frente a Myers.
De la soberbia dirección de Carpenter, ni rastro, por supuesto.