Bueno, bájame un cambio, Ponyo, hazme el favor. O no se puede decir nada? Yo entiendo que duplicar y distribuir con ánimo de lucro es ilegal. No un limbo difuso abierto a interpretaciones y alegalidades. Y que por eso, entre otros, se persigue la piratería del top manta, que no deja de ser un mercado organizado de bootlegs.
Los eslabones de la cadena van desde estudios, productoras y gente que come del cine hasta comercializadoras multinacionales, pasando por editoras y distribuidoras locales, incluso con un estado que grava con impuestos los mismos productos contra los que legisla. Múltiples interesados en seguir el libro al pie de la letra. Y resulta que aquí lo más reprochable es que compañeros, o la gente, y por amor a las películas, adquieran dichas ediciones?
Yo pienso que no. No podemos andar de polícias de una supuesta moralidad que ni los verdaderos interesados tienen interés en hacer respetar.