Este nuevo material, que tiene el grosor de un simple átomo, será un elemento esencial que dará un vuelco espectacular a la tecnología, tal y como la conocemos en la actualidad. Teléfonos móviles, tablets, chips, baterías, ordenadores, relojes, lectores electrónicos… todo un sinfín de elementos que tendrán una dimensión mucho más reducida, duración más prolongada, muchísima más rapidez en el transporte de la información y todo ello con un coste de fabricación sensiblemente inferior a los actuales.
¿Os imagináis una pared "empapelada" con este material y en la cual se pueda actuar sobre ella de forma electrónica como si de una pantalla gigante se tratara? O las posibilidades que pueden desarrollarse con un material como este, capaz de interactuar con la energía solar, multiplicando exponencialmente la energía recibida . Pues esas podrían ser solamente dos de entre las múltiples aplicaciones que este material nos va a ofrecer.
Ya se están empezando a fabricar los primeros prototipos de tablets, baterías o teléfonos móviles con el grafeno como material esencial y, desde luego, los resultados parecen altamente prometedores.
Y eso no es todo, amigos. No solo es el grafeno el material de moda en el complejo mundo de los avances científicos, sino que ya se encuentran bastante avanzadas los experimentos con materiales todavía más “revolucionarios” como, por ejemplo, la nanocelulosa cristalina.
Posiblemente de aquí a unos pocos años, todo lo que conocemos actualmente en relación a esta querida afición nuestra a los “cacharros”, deberá ser vista desde puntos de vista totalmente diferentes al actual.