Cualquier incongruencia de guión puede ser perfectamente justificada, depende de las ganas que cada uno tenga de hacerlo. Yo creo que es una película con un tono y una atmósfera fascinantes, con un gran dominio del ritmo, con esa capacidad de Shyamalan de conseguir lo extraordinario con lo más sencillo, con su habitual imaginación en la puesta en escena y con un dominio del oficio del cine que ya casi nadie de menos de 70 años tiene. Para mí Glass es la mejor película que ha hecho Shyamalan en los últimos veinte años, y bastante mejor que la rutinaria Múltiple, cuyo único hallazgo interesante era su sorprendente sorpresa final.