Eso se nota desde El último duelo. Creo que hay él lo dio todo, pero el público (o mucha parte de ese público) ignoró completamente esa película, que para mí, es perfecta en todos sus puntos, y es el punto más alto de su director en maestría a la hora de dirigir. A partir de ahí, probablemente sí que tenga esa sensación de que todo lo que rueda es para que su director se mantenga ocupado.