Yo, en cambio, tengo del todo olvidada Lo que el viento se llevó, salvo cuando algún libro académico quiere recordármela.

No creo que las películas puedan juzgarse por su contexto, ni creo que se parezcan nada Sentido y Sensibilidad y la totémica Orgullo y prejuicio. Tampoco creo que haya películas para mujeres y para hombres.

Cuando Sutherland habla al final de Orgullo y prejuicio, y llora, yo lloré. Y miré a mi mujer y también lloraba.

Y no pasa nada, todo siguió igual. Quizá, por unos instantes, algo más bonito.