Hola, soy nuevo por estos lares (me congratulo de haberos encontrado, pues estoy aprendiendo bastantes cosas leyendo el foro). Creo que lo primero que debo hacer es presentarme:
Empezaré diciendo que soy, supongo que como todos vosotros, un cinéfilo empedernido. Tengo instalado desde hace aproximadamente unos tres años un sistema home cinema con el que estoy muy satisfecho hasta la fecha. Pero el gran ausente hasta el momento había sido el proyector.
Y ahora va mi peripecia: Pensando que ha llegado el momento de adquirir el ansiado proyector, hace unos días salí a buscarlo y encontré un DLP bastante bien de precio en una tienda de la cadena de electrodomésticos “B…” (no sé si debo dar nombres, así que de momento lo omitiré).
Desgraciadamente, en este sitio no tienen una sala adecuada donde ver este tipo de aparatos en funcionamiento, así que tienes que llevarte bien empolladas las características del equipo que quieres y fiarte del vendedor cuando te dice que ese que te llevas, aunque es la última unidad de ese modelo que les queda, no es el de exposición y está, por supuesto, sin usar. Bien, pues una vez en casa, en una primera prueba, compruebo que la lámpara tiene nada menos que ¡44 horas de uso! Al día siguiente voy de nuevo al comercio (a unos 25 kms. de mi casa) planteo mi problema y, aunque tienen que consultarlo con la dirección, posteriormente me dicen que si quiero me cambian la lámpara por una nueva, a lo que, en principio accedo ya que el aparato me convence y siempre que tenga la lámpara intacta, no me importa que el aparato tenga algo de uso. Añadiré, a modo de anécdota que a una vendedora le resultó extraño que me quejara por ese motivo ya que, según ella, 44 horas supone un mínimo porcentaje en la vida de la lámpara y esa utilización se habría hecho en la fábrica durante los ajustes del aparato (¿?). Con la promesa del cambio de bombilla, continúo con la instalación del aparato y al ir a conectar la entrada de RGB, ésta no funciona. Nueva visita al servicio de atención al cliente. Les planteo la posibilidad de probar el aparato allí mismo, ya que cabía la posibilidad de que el fallo no fuera del aparato si no, simplemente del cable o incluso de mi DVD. Después de mucho insistir, (pues no estaban por la labor), consigo que lo prueben delante de mí y, efectivamente, el aparato está mal. Debo reconocer que en todo momento se me ofreció la posibilidad de devolverme el dinero, pero yo lo que quería era un proyector. Finalmente, me ofrecen cambiarlo por otro modelo de otra marca que tiene el mismo precio, el cual no me convence mucho en principio, pero como allí no hay manera de probarlo me lo llevo a casa con la posibilidad, una vez más, de devolverlo si no me gusta el resultado. Tal como sospechaba, tras probarlo en casa, el equipo no termina de convencerme, así que voy de nuevo a cambiarlo, aunque esta vez lo hago en otro establecimiento de la misma cadena “B…” donde encuentro un proyector de otra marca por el mismo precio. Me lo cambian sin problemas y cuando lo conecto en casa… ¡Tachaaaaaaannnnn! Contador de tiempo de lámpara: ¡80 HORAS! Este es el punto en el que me encuentro en este momento. He resumido todo lo que he podido la narración, pero llevo con esto más de una semana y muchos kilómetros recorridos, pues han sido muchas las idas y venidas. Mañana mismo, si puedo, iré a devolverlo definitivamente. ¿Alguien me puede recomendar algún comercio fiable, especializado en el tema, que sea suficientemente serio y donde pueda probar el equipo y plantear mis dudas a los vendedores? (Zona Madrid o alrededores).
Os lo agradecería enormemente.
Saludos a todos.