El principio de la cinta arranca muy bien, mostrandonos Egipto en todo su esplendor, tanto Bale como Edgerton bordan sus papeles y lo que si note es que Weaver esta un poco diluida en su papel (me huelo a recorte de sus escenas) al igual que Turturro.
Hacia la mitad la pelicula me sigue pareciendo bastante potable, el ritmo no decae y desde luego si la cinta se sostiene es por Bale, que se cree su papel y por la garra de Scott y las preciosas localizaciones. Destaco a Maria Valverde que me ha parecido muy correcta en su papel, rodando en otro idioma y con Bale al lado, no se porque tanta critica a la chica cuando cumple su papel (tambien me huele a recorte de sus escenas).
Es cuando empiezan las plagas de Egipto y esas conversaciones metafisicas con ese niño-Dios que la pelicula empieza a decaer e incluso los actores lo acusan. Como si de la misma locura que parece en cierto modo acechar al personaje de Bale desde que se da el golpe en la cabeza, la pelicula sufre en su parte final una pedrada que la hace decaer bastante, aun asi y como tampoco dura 3 horas (el tito Nolan haber si aprende) no se hace eterna y creo que Scott salva al final la funcion.
Puede que no llegue a la altura de Gladiator u otras pero entretiene y es un espectaculo en toda regla.
Como nota final me ha emocionado la dedicatoria de la pelicula, evidentemente Scott se la ha dedicado a su malogrado hermano