Mi blog: www.criticodecine.es
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Totalmente de acuerdo. Marlon Brando venía de hacer unos papelones enormes en otros films y pienso yo que La ley del silencio ya fue lo que terminó por torcer el brazo de la Academia (un brazo grande, gordo, ..) y le dieron el Oscar merecidísimo.
De James Dean, en mi opinión, y más allá de la imagen icónica, solo pudimos ver destellos de su categoría. Y no fue por su culpa, está claro.
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Dean cumplió el deseo que expresaba el personaje de "Pretty Boy" Romano (John Derek en la pantalla) en el film de Nicholas Ray Knock on Any Door (que revisamos en su día en el "otro rincón", a iniciativa de Alcaudón):"live fast, die young and have a good-looking corpse".
Ese deseo, de forma más o menos inducida o no, se ha cumplido en muchos casos, en especial en el ámbito de la música, con los numerosos miembros del club de los 27.
Con respecto a Dean, creo que las claves son el Mito de las Adonias y Praxíteles. Los griegos, como en casi todo, llegaron antes.
De todas maneras, y a pesar que Dean es el protagonista absoluto del film, su sobreinterpretación está maravillosamente contenido (por la dirección), o sea, en ningún momento el film pierde pie...
De hecho, creo que es una película donde no solo su sobreinterepretación no molesta, es que creo que es invisible. El drama y su tratamiento la diluye.
Es una película tremendamente bien hecha, es una película preciosista, es una obra maestra por todo el exterior, y por su interior...Porque es terriblemente perversa en su honestidad.
Como digo, es un film que el único problema que pudiera tener es la misma que Lean o leer a Dostoievsky..Que repetir, se te puede hacer bola.
Invisible... No lo veo así, como recogeré en mi comentario (que, por cierto, ya lo he acabado, pero para no estresar a nadie, me esperaré al viernes para publicarlo). A mí sí me parece visible, incluso demasiado visible, a punto de dar al traste con más de una escena. Lo cual no malogra el film, porque a pesar de esa sobreactuación hay mucho de bueno en él, incluso en el propio Dean, actor por el que siento una cierta ambivalencia a la hora de valorar su trabajo: incluso cuando no me gusta (y hay varios momentos en East of Eden en que no me gusta), no puedo dejar de sentir una cierta fascinación por él. Supongo que de esa materia están hechos los mitos.
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Sí, y más en la época. Por ejemplo, su compañera de reparto en Al este del Edén, Julie Harris medía 1,63, con lo cual, hacían buena pareja.
Por el contrario, Gary Cooper o Gregory Peck medían 1,90 y James Stewart, 1,91. Hasta Cary Grant era grande, con 1,87. Por eso, casi todos ellos eran galanes o salían en pelis del Oeste.
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En cambio, a Bogart con 1,73, Cagney con 1,65, Raft con 1,70 o Robinson también con 1,70, les tocaba hacer de gánsters y dedicarse al cine noir. Aunque Alan Ladd, con sus 1,68 (mi altura ), otro con muchos papeles en el noir, consiguió hacer de héroe en algún western, como en la inolvidable Shane.
Puede que no invisible, pero sí camuflado en la inmensa intensidad del film durante todo su recorrido...La película en cuestión de drama, no da respiro (ni suspiro).
Hasta la famosa toma del tren (una transición de escena a escena), es de una fuerza dramática tremenda. También ayudado por una banda sonora extenuante... Es una película enormemente cargante...Eso se lo puedo aceptar a sus críticos...
Con respecto a este ¨Mito¨, que más que narciso (Brando es más narciso), epata con las Adonias, se debe a una evolución de cualquier sistema social que avanza..Sólo se da en esas consideraciones...
Porque no es un auténtico narciso?...Pues ahí está el ángel caido de Cabanel....Está, para los más jóvenes el Anakin de Star Wars. Quiero decir, aún el narciso tiene una responsabilidad que después no cumple, cierto, pero la tiene asignada...No lo hace por egoismo, por celos, ect.
O sea, el ¨Mito de las Adonias¨ llega a ser digamos como alguien que ya no tiene si quiera, una responsabilidad concreta, un propósito asignado por...ya sea el destino, la autoridad, lo que sea.
Estoy hablando de la imagen de Dean en concreto, no de su personaje...Aunque algo hay de eso.
Con respecto a su casting...Es como ¨Juego de tronos¨, no dudo que el muchacho que hace de Jon Nieve, sea pésimo actor, pero es un acierto de casting muy ajustado.
Hay por supuesto una fotogenia de Dean...Incluso al lado de Paul Newman, en las famosas imagenes del casting, diluye de la imagen a Newman (nada menos). Es importante su tamaño de cabeza, grande, incluso sin tupé...Desproporcionado en la realidad, pero que para los planos de cine, como ya dijimos hace tiempo, siempre suman en una actuación (en el carisma mas bien)...De hecho yo pensé si era posible y viable una correcciones en la distancia focal de la lente para primeros planos según el volumen de la cabeza...Cosa que al final, salvo excepciones, tienes que desestimar.
Última edición por C.Bethencourt; 02/12/2020 a las 16:15
Qué manía le tenéis a James Dean que a mí y no es coña me parece un magnífico actor y que está insuperable en la película.
Y no me hagáis soltar la lengua que luego me acusan de delator...
mad dog, del "no era muy alto" mío al "muy bajito" tuyo hay bastantes centímetros. Y no los que Alex piensa!!! De todas formas, y hablando de Dean, no creo en absoluto que su imagen se viera perjudicada por su altura. Más bien, al contrario. Si James Dean, tiene de algo de héroe, es de personajes solitarios, marginados, no comprendidos, aparentemente débiles,...que con seguridad nos sorprenderán.
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Yo mido 1,75.
Me apunto Peyton Place para un futuro, que no la he visto. Y tengo dudas de si he visto "Como un torrente".
Por cierto, un final de carrera profesional un tanto anticlimático tuvo Delmer Daves en los 60'. Es un director serie A, no lo suficientemente valorado creo, del que no hay mucha bibliografía o entrevistas. Algún artículo he leído y deja caer la idea de que sus últimos años tras las cámaras pudieron afectar a su intachable filmografía. Luego estuvo 15 años sin hacer nada hasta que falleció, no sé si por problemas de salud, porque se rindió o porque, como le pasó a John Sturges, se cansó o desmotivó de hacer cine y en su lugar se jubiló para ir de pesca.
A mí Dean me produce cierta ambivalencia como algunos habéis subrayado, y también coincido en que no le dio tiempo relamente a mostrar todo el arsenal que pudiera tener dentro. A veces está muy entonado y en otras está muy sobreactuado. Se nos privó de su madurez: los años 60, los años 70, aunque presiento que su vida no hubiese sido muy larga. Un Elvis, sin llegar a los 50.
POR CIERTO, no olvidemos, aunque quizá a algunos os pille por sorpresa esta noticia que se publicó en su día:
James Dean resucitará gracias al CGI en la película 'Finding Jack' 65 años después de su muerte
Pero que nadie la cuente en su filmografía si el proyecto sigue adelante, que con la pandemia de por medio no sé cómo quedará la cosa. No será él. Y arrastrará a otros intérpretes ya fallecidos en apariciones post-mortem.
En ésa línea camino yo también un poco. Magnético era, pero a veces su imán se potencia tanto que me absorbe hasta el hierro de la hemoglobina. Fascinante y excesivo, dos palabras que con frecuencia tienden a ir paralelas, no necesariamente en el mal sentido de forma abierta.