Si me ha gustado que la linea entre buenos y malos sea bastante fina y en el fondo sea dificil sentir simpatia por los dos personajes masculinos, tanto el supuestamente "inocente" marido que al final es el tipico abuson de instituto que ha seguido manipulando de adulto a su alrededor para conseguir lo que quiere, hasta el personaje de Gordo, muy bien interpretado por Gordo por el que sentimos simpatia aunque al final se revele como un manipulador tambien (ese final cuando se quita el supuesto cabestrillo con el que ha ido a ver al personaje de Rebecca Hall)