"NO HICIERON NADA QUE SUPONGA UNA INTERFERENCIA EN EL RESULTADO".
La FIA exculpa a McLaren de las supuestas órdenes de equipo en Mónaco.
La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) ha exculpado al equipo McLaren-Mercedes de haber manipulado el resultado del Gran Premio de Mónaco, dos días después de haber abierto una investigación por supuestas órdenes de equipo. "McLaren estaba en condiciones de adoptar una óptima estrategia de equipo porque tenían una ventaja sustancial sobre los demás coches. No hicieron nada que pudiera ser interpretado como interferencia en el resultado de la carrera", señala la FIA.
"Tras haber estudiado las conversaciones por radio entre el equipo Vodafone McLaren Mercedes y sus pilotos, conjuntamente con el informe del supervisor de la FIA y los datos de la escudería, está claro que las acciones de McLaren durante el Gran Premio de Mónaco de 2007 fueron completamente legítimas y no es necesario emprender acción alguna", agrega la federación.
La FIA desglosa en siete puntos sus argumentos:
1. "Una estrategia a dos paradas es lo ideal en Mónaco, a menos que intervenga el coche de seguridad, en cuyo caso a veces es mejor ir a un solo repostaje.
2. El coche de seguridad intervino en cuatro de las últimas cinco ediciones del Gran Premio de Mónaco.
3. Bajo la actual reglamentación la elección entre ir a una o dos paradas debe asumirse antes de la última fase de la sesión de clasificación.
4. Está claro que según las mediciones de la FIA tras la clasificatoria, el equipo McLaren suministró al coche de Hamilton combustible para dar cinco vueltas más que Alonso.
5. Esto otorgó a Hamilton la opción de elegir una estrategia a una sola parada, en el caso de que el coche de seguridad interviniera durante el tramo de carrera ('stint') hasta el primer repostaje.
6. El coche de seguridad no intervino.
7. Los coches de McLaren fueron significativamente más veloces que el resto de monoplazas".
Así ven las acciones de McLaren
Asimismo, la FIA señala que "el primer objetivo de cualquier equipo es que alguno de sus dos pilotos gane. Si esto es posible, la escudería tratará de que el otro acabe segundo". "Al no intervenir el coche de seguridad durante el primer sector de la carrera de Alonso, existía un pequeño riesgo de que lo hiciera durante las cinco vueltas extras que tenía Hamilton antes de su primer repostaje. Esto lo habría colocado al final del pelotón y con una significativa desventaja respecto a los coches que hubieran optado por una estrategia a una sola parada", explica la FIA.
En el caso de que el coche de seguridad hubiese intervenido, la FIA añade que "los últimos coches habrían repostado alrededor de la vuelta número 40, cuando el 'safety car' hubiese regresado a la calle de garajes durante las vueltas extra de Hamilton". "Por estas mismas razones, Hamilton recibió la orden de adelantar su segundo repostaje, para asegurar el segundo puesto, con o sin coche de seguridad", comenta.
La FIA también ha tenido en cuenta que "si Hamilton hubiese tenido delante a un piloto que no fuera su compañero, McLaren podría arriesgarse a asumir una salida del coche de seguridad y mantener a Hamilton en la pista mientras tuviese combustible con la esperanza de que se colocase primero tras salir de la calle de garajes después de cualquiera de sus dos paradas".
Según la FIA "los equipos no están obligados a asumir riesgos para tratar de que sus pilotos se adelanten entre sí. Sería una tontería hacer eso". "Es habitual que un equipo diga a sus pilotos que aminoren el ritmo cuando éstos tienen una ventaja sustancial. Esto se hace con el objetivo de minimizar el riesgo de sufrir problemas técnicos o de otra índole. Es también una práctica habitual y totalmente razonable pedir a los pilotos que no se pongan en riesgo entre sí", añade.
Se prohibieron en 2002.
La Federación recuerda que en la reunión de la Comisión de Fórmula 1 del 28 de octubre de 2002 se decidió con 23 a favor y tres abstenciones, que "quedan prohibidas las órdenes de equipo que afecten a los resultados de una carrera". Esta decisión fue confirmada por el Consejo Mundial del Deporte del Automóvil y aparece en el artículo 39.1 del Reglamento Deportivo de la Fórmula 1 de 2007. "Las órdenes de equipo que afecten al resultado de una carrera están prohibidas", insiste. Las órdenes de equipo se prohibieron en la Fórmula 1 desde que Ferrari ordenó al brasileño Rubens Barrichello que cediera el liderazgo al alemán Michael Schumacher en el Gran Premio de Austria de 2002.