El testigo, experto en terrorismo a nivel nacional, ha asegurado —en respuesta a una pregunta de la Asociación de Afectados por el 11-M sobre la presunta colaboración de ETA en el 11-S de Nueva York— que no le consta ninguna relación entre ETA y el mundo islamista.
Encuentro con Trashorras
Suárez Trashorras. (La Otra)El testigo policial reconoce que cuando acudió a Asturias, su objetivo no era entrevistar a Trashorras.
"Fuimos a Oviedo el 16 de marzo para comprobar si los detonadores de la Kangoo eran de Caolines de Merillés (...), los responsables de la empresa nos vendieron la imagen de que era una empresa modelo, en la que no se podía sacar ni un lápiz, con lo que no nos sirvió de nada", afirma.
Sin embargo, una vez allí, conoció de Suárez Trashorras: "
Me dijo el jefe de Estupefacientes de Avilés —Manolón— que había una persona con información, y que decía que lo de Madrid era obra de unos moros", recuerda.
A partir de ese momento, la policía recabó datos y comprobó que
había intercambio de llamadas entre las tarjetas relacionadas con el atentado y Avilés: "Nos dieron los datos por teléfono cuando estábamos en Avilés (...), cuando entrevistamos a Trashorras pensamos que no perdíamos nada", agrega.
"Radicales"
Según el testigo,
Trashorras le contó que "los moros eran unos radicales, que podían estar vinculados a este atentado". A partir de ese momento, las Fuerzas de Seguridad quisieron identificarlos.
"Sólo nos dijo que había uno que se llamaba Rafa, pero no sabíamos si el nombre era bueno o malo (...), también nos habló de Mowgli —por su parecido con el personaje de El libro de la selva, pero nunca de explosivos", asegura.
Decían que eran el ejército más potente porque no tenían miedo a morir
Trashorras también le explicó al testigo que cuando se produjo el 11-S —en Nueva York—, lo justificaban como una forma de defender a la gente que cae en Palestina. "Decían que eran el ejército más potente del mundo, y que tenían la ventaja de que no tenían miedo a morir", recuerda el agente de las declaraciones de Trashorras.
Aunque el testigo describe que el encuentro con Trashorras fue muy informal, se alargó hasta bien entrada la madrugada: "Tardamos en encontrar las casas para identificar a las personas de las que nos hablaba Trashorras", afirma.
La detención de Trashorras
Sobre las 7 o las 8 de la mañana siguiente, los policías detienen a Suárez Trashorras. "Recibimos la orden desde Madrid (...), con los datos que tenían, quizás pensaron que Trashorras estaba relacionado. Lógicamente, el detenido se enfadó un poquito", recuerda.
Suárez Trashorras explicó, en los días siguientes, su relación con los marroquíes. "Nos decía que les enseñó la zona de la mina porque él trabajaba allí, para que la vieran", asegura.
Sin rastro de ETA
Según ha recordado el testigo policial,
Trashorras jamás le habló de ETA o de que alguno de los moros tuviese amistad con algún miembro de la banda terrorista ETA.
"Jamás se habló de eso", afirma tajantemente el testigo.
En un momento determinado, el letrado de la Asociación de Afectados del 11-M ha realizado una batería de preguntas sobre la posible relación de ETA y el mundo islamista: "¿Sabe si ETA participo en los atentados del 11-S en Nueva York?¿le consta que ETA mantenga alguna relación con el mundo islamista?", ha preguntado José María Fuster Fabra.
El testigo, especialista en ETA, ha asegurado que "no me consta que haya ninguna relación entre ETA y el mundo islamista"