Es una experiencia absorbente. En lo que respecta a la calidad audiovisual de la cinta creo que no se le puede poner ni una sola pega. La dirección de Robert Eggers viene a confirmar lo que ya vimos en 'La Bruja'. No le hacen falta demasiados artificios para atrapar al espectador y sumergirlo en el discurso que quiere dar. Sabe donde poner la cámara y especialmente sabe componer imágenes muy potentes. La decisión de rodar la película con un ratio tan peculiar y en blanco y negro es muy acertada. Con lo primero hace que nos sintamos tan encerrados en ese faro como sus protagonistas, aunque al inicio sea raro, con el tiempo te va absorbiendo y acaba siendo algo claustrofobico. Con lo segundo, llena a la película de una sensación de nostalgia/melancolía/tristeza. Todo esto hacen que sea una película muy especial, con una personalidad enorme, que cuenta con una fotografía que te deja embobado ante tal despliegue. Su apartado sonoro no se queda atrás. La banda sonora es inquietante y el sonido es algo bestial.
Pattinson y Dafoe están inconmensurables. A Pattinson nunca lo había visto tan bien. A Dafoe, pocas veces lo he visto TAN entregado y enchufado a una película (y mira que es de los que más se compromete). Ambos dan todo lo que tienen y el resultado final es el de una química brutal entre ellos, que no solo sostienen toda la película, también dejan escenas para el recuerdo. El monologo de Dafoe es algo alucinante. Toda la parte final, tremenda. Y la escena con la gaviota, brutal. Dentro de una película que destaca tantísimo en los aspectos técnicos, estos dos son los mejor de ella.
No acabo de entender aquellos que van diciendo que no cuenta nada. Si entiendo que haya muchos que huyen de este tipo de cine. El más abstracto y el que más se presta a la interpretación del espectador. Pero, dentro de la simpleza de la propuesta, consigue hablar y reflexionar sobre la soledad, la inferioridad, el egoísmo o la desesperación. Es de esas cintas que como no entres en ella desde el inicio, a mitad de película estarás deseando que acabe. Pero como logres entrar, vas a querer quedarte para siempre.
Mi caso ha sido este último. Un 8.