Sí, la de Chaney es la mejor. Es la única que consigue captar todos los matices del Erik de la novela. Y que Lon Chaney...¡era mucho Lon Chaney! No sólo es que fuera un actor como la copa de un pino...¡es que él mismo se hacía todos sus maquillajes y caracterizaciones con cosas que encontraba, porque en aquella época no había casi nada! ¿Os imagináis, a la vista de El trío fantástico, lo que habría podido hacer en el sonoro? Una pena que falleciera tan pronto. Para El Fantasma de la Ópera, hizo incluir en su contrato una cláusula por la cual ninguna foto de él maquillado como Erik sería incluída en la promoción de la película, para aumentar el suspense.
Respecto de mis siguientes versiones favoritas...no sabría cuál decirte. Como historia de terror, creo que la mejor es la de 1989, con Robert Englund como el Fantasma. La primera vez que vi esta versión no me gustó (y es que es bastante gore), pero poco a poco he ido empezando a apreciarla. Como historia romántica, en plan cuento de hadas con toques góticos, la de 1990 (a pesar de, vista hoy, que le encuentro bastantes defectos, siempre tendré debilidad por ésta porque fue una de las primeras versiones que vi). La de la Hammer de 1962 con Herbert Lom, también me gusta bastante. Desde luego, más que la de 1943 con Claude Rains, que es una de las que menos me gusta. La de 1983, con Maximilian Schell y Jane Seymour, me gustó bastante la primera vez que la vi, pero es la típica película que no resiste un segundo visionado. El Fantasma del Paraíso me pareció un auténtico delirio la primera vez que la vi, pero luego he llegado a la conclusión de que presenta un giro sumamente interesante respecto a la historia faustiana original. Y la de 2004...bueno, vista en el cine resulta espectacular, no lo niego, pero pierde muchos puntos en el trasvase sala de cine-salón de casa. Básicamente un ruidoso y llamativo videoclip de dos horas, con caras bonitas, cuerpos sexies, decorados caros y horteras y canciones pegadizas. Gerald Butler, no lo voy a negar, es un hombre muy atractivo y sexy. Y ahí es donde empiezan mis problemas, porque el Fantasma no tiene que ser ni atractivo ni sexy: está deformado y da miedo y repugnancia, o pena, en el mejor de los casos...Y la deformación, en esta película...da risa...vamos, que deformado y todo como está Gerik, seguro que más de una se iba con él ¿dónde está el problema? La historia me parece demasiado lineal en esta versión: no se profundiza nada en los personajes. Intentaré volver sobre esto más adelante.