Esa era mi primera suposición.![]()
Esa era mi primera suposición.![]()
Por cierto en aquella época creo que no había laboratorio Technicolor en España. Bien entrados los 60 creo que Bronston llevaba su material a Londres.
Por aquella época también había sucursal en Roma me parece.
Yo en las películas actuales soy incapaz de averiguar en qué formato de Scope se han rodado o que tipo de color ha sido usado.
De hecho, ni siquiera la IMDb se aventura a intentar deshacer la madeja.
Hoy casi todo se rueda en digital. Bueno se “graba”…![]()
Todo ha cambiado desde el abandono del fotoquímico y mi interés por los formatos es mínimo actualmente.
Prefiero hacer investigación arqueológica sobre viejos títulos, muchos de ellos olvidados.
Si… yo también debería estar en un museo.![]()
Precisamente para comentar ese y cualquier otro tipo de cine se creó este espacio.
![]()
Comentario censurado por el propio autor.
![]()
Última edición por Alcaudón; 21/06/2024 a las 11:47
En cuanto al tema de los formatos en estos enlaces (y, por supuesto, explorando cada página a fondo) se puede encontrar información muy valiosa especialmente en lo referente al cine clásico:
https://www.widescreenmuseum.com/widescreen/lobby.htm
https://www.widescreenmuseum.com/wid...screenlist.htm
https://www.in70mm.com/presents/libr...ical/index.htm
![]()
Así es. Parece que falleció el creador de widescreenmuseum.
Aunque creo que su hijo continúa conservando la web.
Fíjate si comparto tu parecer, que a día de hoy (2024, no perdamos el dato) sigo haciendo fotografías en fotoquímico y revelándolas en casa en mi laboratorio casero. Durante muchos años me dediqué también a filmar en Súper 8 y a revelar yo mismo la película, Kodachrome y Ektachrome sobre todo. Hoy en día es bastante inviable, ya que el coste de filmar y revelar 3 minutos de película se pone sobre los 100 euros...Es un mercado minoritario y reducido a profesionales que aún usan el formato para sus trabajos.
Yo el otro día me compré el trailer de una película 35mm anamórfico solamente por el placer de ver los fotogramas al trasluz.
Por cierto que pretendía escanear algunos fotogramas y no puedo de ninguna manera. Acabaré fotografiándolos con alguna luz por debajo.
Y finalmente mis investigaciones dan sus frutos.
He aquí la prueba de la doble versión de "Los amantes del desierto".
Fijaos en el soldado de la derecha y dónde lleva la lanza en una toma y otra.![]()
Si tienes un escáner "normal" es más difícil. La luz del escáner hace un barrido (normalmente, de izquierda a derecha) y el negativo necesita que le dé la luz por ambos lados a la vez. Yo no sé como va, porque no suelo escanearlos, directamente saco copias en papel con la ampliadora, pero sé que por Internet hay "truquillos" (encontrarás seguro tutoriales por Internet) para poder escanear con un escáner normal, creando una especie de cartulina, a modo de reflector, para que la luz vaya donde debe.
Enhorabuena por la labor de investigación. Sorprende que, con lo escasos que eran los presupuestos del cine español en aquellos tiempos (aunque fuese una coproducción: Italia tampoco disfrutaba de grandes lujos), se acometiese un doble rodaje; sin embargo, parece evidente que hubo doble versión.
Última edición por Twist; 21/06/2024 a las 18:34
Ciertamente sorprendente puesto que en el cine norteamericano solo se hizo doble versión de las primeras películas rodadas en CinemaScope.
Ver al respecto:
https://sites.google.com/site/3dfilm...een-production
Imagino que en Europa - y en España en particular - la transición fue mucho más lenta que en los EUA debido a los devastadores efectos de la Segunda Guerra Mundial - y de la Guerra Civil y la posguerra en nuestro caso - y por ello muchos cines todavía no tenían las nuevas pantallas que se requerían para poder exhibir las películas rodadas en formatos que iban desde 1.66:1 a 2.55: 1.
![]()
Aquí https://www.hometheaterforum.com/com...tation.313215/ y de manos de Bob Furmanek, el autor de la página anterior, se encuentra el mayor y más documentado foro de debate sobre los OAR de las películas.
![]()
De ahí procede, por ejemplo, el siguiente gráfico que hace referencia expresa al AR en el que se exhibían las películas en las salas de cine británicas entre 1957 y 1970:
![]()
Curiosamente una película británica de 1957 siempre la prefiero ver en 1,37:1, nunca en panorámico. “La maldición de Frankenstein”.
Con respecto a la implantación de pantallas panorámicas en España me parece que fue lenta, al menos fuera de las capitales.
Mi madre, ante una pregunta mía de como se veían en el cine del pueblo las películas scope me dijo que la imagen salía por los lados.![]()
Pero bueno, seguro que le compensó ver en Barcelona “El Cid” e ir al Cinerama.![]()
Desde luego debía ser toda una experiencia el ver una película pared/pantalla/pared.![]()
LAS OBRAS DE STEPHEN KING (1947) ADAPTADAS A LA GRAN (O A LA PEQUEÑA) PANTALLA SEGÚN LA CRONOLOGÍA DE LAS MISMAS… CON ALGÚN QUE OTRO PEQUEÑO DESVÍO… / PARTE IX:
CHRISTINE (1983, ídem)
Copyright 1983 Columbia Pictures Industries, Inc.
Columbia Pictures presents / from Polar Film / a Richard Kobritz production.
Estrenada el 9 de diciembre de 1983 en los EUA y el 25 de junio de 1984 en España.
Dirigida por John Carpenter.
Producida por Richard Kobritz y Larry Franco.
Escrita por Bill Phillips, basada en la novela homónima de Stephen King (The Viking Press, Nueva York, 29 de abril de 1983).
Fotografiada por Donald M. Morgan, en Metrocolor (copias) y Panavision.
Musicalizada por John Carpenter y Alan Howarth.
Protagonizada por Keith Gordon (Arnie Cunningham), John Stockwell (Dennis Guilder), Alexandra Paul (Leigh Cabot), Robert Prosky (Will Darnell) y Harry Dean Stanton (Detective Rudolph Junkins) + Christine Belford (Regina Cunningham, madre de Arnie) y Roberts Blossom (George LeBay).
Duración: 1:49:59 (Copia en BD editada por la británica Powerhouse en 2007 [y número 001 de la colección]).
Presupuesto: 10.000.000 de dólares.
Recaudación: 21.000.000 de dólares.
…
Coordenadas espacio / temporales:
Detroit, Michigan / 1957 (prólogo)
Rockbridge, California / 1978-1979
…
Si eliminamos del listado las novelas que el autor escribió bajo el pseudónimo Richard Bachman, “Christine” sería la 9ª de las que publicó con su nombre real.
De esas nueve novelas ya he comentadosiete y solo me ha saltado “La danza de la muerte” (por cierto, descatalogada desde hace tiempo) / “Apocalipsis” (1979 / 1990) – sin duda, una de sus mejores obras, al menos en su versión “abreviada” – porque no fue llevada (en este caso) a la (pequeña) pantalla hasta 1994 y el primero de los siete volúmenes de los que consta la que muchos dicen – el autor incluido – que es su obra más personal, “La Torre Oscura”, dado su carácter y al hecho de que no fue trasladada (en este otro caso) a la gran pantalla hasta 2017 y… sobre la que es mejor correr un (es)túpido velo…
Esta revisión, que ya va por su 9ª (ya es casualidad) entrega, tiene un ritmo propio dado que antes de verme la película correspondiente me leo (o releo) la novela (novela corta, cuento o cuento corto) que toma como base para de esta forma hacer una comparativa siquiera somera entre ambas.
Y aunque disto de ser un fanático (y todavía más de ser un experto) de la obra del escritor nacido en Portland, Maine, también he de reconocer que con el paso del tiempo le estoy cogiendo gusto a su narrativa y por ello no acabo de entender el desprecio que las “elites intelectuales” (y que nadie se ofenda, por favor) sienten hacia él y que contrasta vivamente con la entusiasta acogida de sus millones de lectores a lo largo y ancho del planeta… y de esto hace ya la friolera de 50 años…
Eso sí, “Christine” es la primera novela que se me ha hecho larga teniendo en cuenta lo liviano de su argumento.
- No obstante, ese debe permite al autor desarrollar en mayor profundidad a los personajes y las relaciones que se establecen entre ellos.
Por eso (y aunque alguno cuando lea esto estará empezando a afilar su hacha...) siempre que he dicho que “Insólito esplendor / El resplandor” me parece superior a EL RESPLANDOR, si no en la forma (nadie duda – y menos yo – de las capacidades como director del gran Stanley Kubrick) sí en el fondo.
Y es que, aunque pueda resultar chocante a quien no haya leído nunca alguna de las novelas de King, uno de los elementos que más cuida el autor es precisamente la caracterización de los protagonistas.
Ese es el principal motivo por el que sentimos, si volvemos al ejemplo aludido, mucha más empatía por el Jack Torrance de la novela que por el Jack Torrance/Jack Nicholson de la película.
Y todavía más en el caso de Wendy vs Wendy/Shelley Duvall.
Ah, y que conste que la referencia a la 3ª novela de King y el 11º largometraje de Kubrick no es un mero brindis al Sol, como pronto podréis comprobar… -
CHRISTINE fue la primera de las “penitencias” que el gran John Carpenter (1948) – uno de los pocos cineastas contemporáneos al que el adjetivo de “director de culto” le sienta como un guante – hubo de soportar tras el (incomprensible) fracaso (de público – especialmente doloroso - y de crítica) de LA COSA (EL ENIGMA DE OTRO MUNDO) (1982), sin duda una de las cimas del género fantástico, ya sea ciencia ficción y/o terror.
El uso del entrecomillado se debe a que por un lado Carpenter era un admirador de King (de hecho, el neoyorquino había sido el director inicialmente designado para encargarse de llevar a la gran pantalla “Ojos de fuego”… si no hubiese sido por el batacazo económico que supuso la cinta que acabo de comentar…) y por otro porque CHRISTINE es, seguramente, una de las adaptaciones más “fieles” (de nuevo uso el entrecomillado…) que se hayan hecho jamás de una obra del más famoso (e importante) escritor de terror de las últimas décadas.
A eso voy...
De hecho, si nos fijamos en el título de la cinta el mismo no es simplemente CHRISTINE sino...
..., signo de que el director se tomó la película no solo como un simple encargo.
¿Y ahora por qué uso el entrecomillado?
Pues porque al contrario de lo que aparece en la carátula de la (como siempre) magnífica edición en BD de la británica Powerhouse…
… she’s NOT a killer…
… al menos NO en la novela…
Dado que, al parecer el “Plymouth Fury” de 1958 (un automóvil que la Chrysler fabricó entre 1956 y 1978)…
... al que su anterior propietario, Roland D. LeBay, le había puesto el cariñoso apodo de “Christine”, comparte con el todavía más famoso “DMC DeLorean” de 1981 de REGRESO AL FUTURO (1985), de Robert Zemeckis – una película que, al contrario de muchas de sus coetáneas (BLADE RUNNER (1982), de Ridley Scott aparte), se mantiene igual de fresca que en el momento de su estreno – la capacidad de viajar en el tiempo (en este caso al pasado) creo que es un buen momento para establecer las diferencias básicas entre novela y película.
Y precisamente la más importante es que mientras en la novela es el espíritu de LeBay – un personaje al que en la película solo se le nombra por boca de su hermano, George (un espléndido Roberts Blossom)…
... - el que posee el coche, en la cinta es el propio vehículo el que nace maldito desde el mismo momento en que fue montado en la fábrica de Detroit, Michigan, en 1957...
- En este sentido, Carpenter no solo remeda a la perfección el uso que King hace al inicio de cada uno de los capítulos de la novela de una canción del momento (pasado o presente) – aunque algunas sean posteriores a las fechas en las que transcurre la acción… * - sino que lo mejora puesto que la famosa canción “Bad to the Bone” [“Malo hasta la médula”] (1982), de George Thorogood and the Destroyers y que suena tanto al inicio (el nacimiento)…
- Os imagináis que sucede a continuación, ¿no?.... -
... como al final (la muerte… supuestamente...)…
... de “Christine” encierra en su letra una de las dos claves sobre las que gira toda la película… -
* Por cierto, en la edición que poseo ni siquiera se molestaron en traducir la letra de las mismas… aparte de estar plagado de erratas que he tenido que ir corrigiendo a lápiz…
Después de ese primer “mordisco” de “Christine” al primer trabajador que tiene la osadía de intentar comprobar el estado de su motor (y es que a "Christine" no le gusta que nadie le toque sus partes íntimas sin su consentimiento, una forma inteligente por parte del director de explicitar la relación que se establecerá en breve entre el protagonista y ella), Carpenter la clava de nuevo cuando usa en este caso la (inocente) canción “Not Fade Away” ["No se desvanece"] (1957), de (Buddy Holly and) The Crickets en el momento en que otro operario se monta dentro y tiene la descortesía de dejar caer la ceniza de su cigarro en el asiento del copiloto...
De esta forma tan impecable y gracias a la elección de esas dos canciones (y que, por cierto, NO aparecen en la novela) Carpenter nos indica cuáles van a ser los dos conceptos fundamentales sobre los que girará toda la trama, el amor y el odio, casi como si quisiera parecerse al personaje que encarnaba el gran Robert Mitchum en la obra maestra LA NOCHE DEL CAZADOR (1955), de Charles Laughton (y que espero poder comentar en breve en su hilo específico…)…
La otra diferencia significativa es que aunque Carpenter deja clara esa relación de amor (platónico y/o sexual) que surge entre Arnie y “Christine” y que es la fuente de la que brotarán todos los conflictos debido a los celos que esta última sienta hacia su competidora (Leigh, un preciosa, aunque poco expresiva, Alexandra Paul) o hacia los compañeros de instituto que le han hecho daño, apenas se molesta en indicarnos el hecho de que a medida que Arnie va reconstruyendo el coche - dado el lamentable estado en el que se encontraba cuando lo compró - ambos van rejuveneciendo, en una especie de simbiosis entre hombre y máquina que King maneja mucho mejor. O sea, un "regreso al pasado" en sintonía con la espléndida cinta de Zemeckis que mencionaba al principio de mi exposición.
Aunque justo es de reconocer que la despedida final entre ambos expresa a la perfección el amor que sienten el otro por la otra y viceversa...
En la novela (que está estructurada en tres partes, la primera y la última narradas por el héroe de la trama, Dennis [un bien elegido John Stockwell] y que Carpenter igualmente mantiene) esa magnífica secuencia del prólogo no existe como tal dado que en la misma (capítulo uno de la primera parte) Roland comenta que compró el coche en un concesionario y que fue él el que eligió los colores rojo y blanco dado que todos los que se fabricaban de ese modelo se pintaban exclusivamente de este último.
En la película es la propia “Christine” (¿?) la que elige el color y la que, como decía, empieza a hacer sus primeras “travesuras” ya en el taller de montaje.
Retomando la referencia a EL RESPLANDOR, CHRISTINE comparte con ella el hecho de que un objeto no solo esté “poseído” (allí un hotel, aquí un coche) sino el que intente transferir esa maldición a un ser humano (allí Jack, aquí Arnie [un Keith Gordon en la línea del anterior, aunque mucho menos exagerado… afortunadamente…), con los inevitables daños colaterales que ello pueda acarrear...
Aunque en las adaptaciones previas se habían solido respetar las localidades ficticias en las que transcurrían las obras (salvo, curiosamente, en la primera de todos, CARRIE) en este caso se optó por trasladar la acción de Libertyville, Pensilvania a Rockbridge, California, en realidad la misma South Pasadena donde Carpenter había rodado la película que le lanzó al estrellato, LA NOCHE DE HALLOWEEN (1978).
- Curiosa similitud entre esta fecha y el lapso temporal en el que acontece la película… pero también la novela… -
Pese a todo y como decía antes, Carpenter en líneas generales respeta escrupulosamente el argumento de la novela original aunque lógicamente necesita ajustar las casi 600 páginas de la misma a los 110 minutos de duración de la película y que no se hacen para nada largos… al contrario de lo que comentaba al principio sobre la novela…
Curiosamente si en la novela no existe en sentido estricto el prólogo al que antes hacía mención, dado que toda la acción transcurre entre 1978 y 1979 el “amor a primera vista” entre el protagonista y “Christine” y que en la novela, como decía, se producía ya en el primer capítulo, en la cinta se demora hasta pasados los 15 minutos. Una de las pocas infidelidades que el director se permite (aparte de la muy importante y ya indicada) pero que logra estructurar mejor la narrativa.
El resto, como decía, sigue en líneas generales la novela, salvo la muerte del protagonista que en la película acontece durante el acoso al que se ven sometidos Dennis y Leigh por “Christine” con ayuda de una excavadora (en la novela era un simple camión de la basura).
Incluso el (falso) final es idéntico al de la novela, como ya he indicado antes.
La gestación de la película fue un visto y no visto dado que los derechos de la obra fueron comprados por Richard Kobritz (que había sido el productor de la miniserie EL MISTERIO DE SALEM’S LOT [1979]) cuando todavía ni siquiera había sido publicada, hasta el punto de que por primera (y tal vez única vez) la película se estrenó el mismo año en el que la novela vio la luz.
29 de abril de 1983 vs 9 de diciembre de 1983
- De hecho, en 1983 se estrenaron de forma consecutiva CUJO, LA ZONA MUERTA y CHRISTINE pero que yo he comentado según la fecha de edición de la obra en cuestión.
Desde luego no fue una mala cosecha. -
Una muestra más (si hiciera falta) del talento del director a la hora de facturar una película impecable (aunque menor… pero no tanto como muchos parecen pensar...) en un lapso de tiempo tan corto y donde de nuevo deviene capital el uso del formato Panavision para sus cuidadas composiciones, uno de los sellos de identidad del cineasta.
Y como coda final podríamos indicar varias fuentes que bien pudieron servir de inspiración (siquiera tangencial) tanto a la novela como a la película que surgió de ella.
Del mundo del cómic, en el n.º 7 de “Weird Science” (mayo/junio de 1951) el gran escritor y dibujante Harvey Kurtzman incluyó una historia titulada “¡Gregory tenía un Ford-T!” y que nos muestra una relación de amor entre un hombre y un coche (¡que también es rojo!) muy similar a la que se nos cuenta aquí aunque sin tanta violencia de por medio y que podemos leer en la reciente (y excelente) edición que de las distintas colecciones de la combativa EC (recordemos la entrega anterior, CREEPSHOW, todo un homenaje a la misma) está llevando a cabo Diábolo Ediciones…
Y del mundo del cine, cómo no, un telefilme mítico como DUEL (1971, EL DIABLO SOBRE RUEDAS), de Steven Spielberg (aunque basado en un texto previo del gran Richard Matheson) o una película tan simpática como ASESINO INVISIBLE (1977), de Elliot Silverstein y que ya comenté hace unos pocos años en el OR.
En resumen, una cinta que convendría revisar y, especialmente, por los más furibundos seguidores del director nacido en Nueva York y que nos ha dejado huérfanos desde que en 2010 estrenó su último largometraje.
Buenas noches y, buena suerte.
…
Anexo I:
En negrita las novelas (salvo que se indique lo contrario) comentadas hasta la fecha y su primera (o mejor) adaptación a la gran (o la pequeña) pantalla:
Como Stephen King (salvo que se indique lo contrario):
01. 1974 / Carrie (ídem) > 1976 / Brian De Palma
02. 1975 / ‘Salem’s Lot (La hora del vampiro / El misterio de Salem’s Lot) > 1979 / Tobe Hooper (TV)
03. 1977 / The Shinning (Insólito esplendor / El resplandor) > 1980 / Stanley Kubrick
04. 1977 / Rage (Rabia) (como Richard Bachman)
05. 1978 / Night Shift (El umbral de la noche) [Colección] (“El coco”) > 2023 / Rob Savage
06. 1978 / The Stand (La danza de la muerte) > 1990 / The Stand: The Complete & Uncut Edition (Apocalipsis)
07. 1979 / The Long Walk (La larga marcha) (como Richard Bachman)
08. 1979 / The Dead Zone (La zona muerta) > 1983 / David Cronenberg
09. 1980 / Firestarter (Ojos de fuego) > 1984 / Mark L. Lester
10. 1981 / Roadwork (Carretera maldita) (como Richard Bachman)
11. 1981 / Danse Macabre (Danza macabra) [Ensayo]
12. 1981 / Cujo (ídem) > 1983 / Lewis Teague
13. 1982 / The Running Man (El fugitivo) (como Richard Bachman)
14. 1982 / The Dark Tower: The Gunslinger (La Torre Oscura 1: La hierba del diablo / La Torre Oscura I: El pistolero)
15. 1982 / Different Seasons (Las cuatro estaciones I: Primavera y verano + Las cuatro estaciones II: Otoño e invierno) [Colección]
16. 1983 / Christine (ídem) > 1983 / John Carpenter
Miscelánea:
1982 / Creepshow / George A. Romero
Anexo II:
Localizaciones (todas ficticias, salvo en el caso de “Ojos de fuego”) novela / adaptación:
01. Chamberlaine, Maine / ¿?, Carolina del Norte
02. Jerusalem’s Lot, Maine / ídem
03. Hotel “Overlook”, Colorado / ídem
08. Castle Rock, Maine / ídem
09. Nueva York > … > Nueva York / ídem >… > ídem
12. Castle Rock, Maine / ídem
13. Libertyville, Pensilvania / Rockbridge, California
Y como diría la querida compañera Jane Olsen, ahora me retiro a mis aposentos que creo que me he ganado - y con creces - el sustento del día...
![]()
Última edición por Alcaudón; 24/06/2024 a las 10:46
Yo te diría que Lee es el que está más a la izquierda en la imagen que has puesto.
Sobre las peripecias letales de Scott por lo demás, tengo el recuerdo muy lejano y muy borroso de alguna miniserie de TV que fue emitida en España hacia mediados de los años 80, probablemente en sábado o domingo y después de la comida.. No sé si los más veteranos podréis añadir algo al respecto. Ya digo que mis recuerdos son muy precarios.