Creo que si un autor que abordara el personaje, lo amara o al menos hubiera leído la novela de Stoker, no necesitaría de excusas para plasmar la esencia y la verdadera naturaleza del Conde... ¿Qué pasa, que para enfrentarse hoy en día al Demonio, hay que convertirle en un amante de novela romántica barata? ¿Hay que pervertir su identidad para que pueda ser digerido por los teenagers y los políticamente correctos? ¿No puede existir el Mal por el Mal?

En cierta forma, me recuerda a la anécdota del periodista, muy resabiado él, que tras el visionado de "La Cosa" le preguntó a Carpenter, su director, que si la película era una metáfora sobre el incipiente SIDA, etc., a lo que éste contestó que no, que sólo era una película con monstruo...

Hay más autenticidad y fidelidad en los ojos inyectados en sangre de depredador rabioso de Christopher Lee que en cualquier versión de amante de ultratumba moderno y romántico que haya parido algún guionista/escritor enterado.

Por cierto, a ver qué sale de esta producción que nos relata el terrorífico viaje de Barna a Whitby del barco Demeter:

http://www.comingsoon.net/news/movienews.php?id=74097

De su director, me encantan "Hard Candy" y "30 días de oscuridad". De la última que ha dirigido, mejor ni hablo...