Iniciado por
Jane Olsen
Póntela ya. Es una de las mejores películas que se han hecho sobre el Antiguo Egipto. Lo que es vergonzoso es que la novela en la que se basa, aún no haya sido traducida al castellano. Nunca una impostura (porque toda la historia que cuenta la película, y hasta el supuesto faraón cuya vida te cuentan, son falsos) fue tan verosímil. Nada que ver con el Egipto como de representación decimonónica de Aída, florido y lírico, que muestra, por ejemplo, un Cecil B. de Mille, ni el Egipto épico y exuberantemente romántico de la Cleopatra de Manckiewicz. El Egipto de Kawalerowicz es crudo y minimalista, refinado y bárbaro, cruel y sensual, primitivo y enigmático. Algo muy parecido a lo que te imaginas pudo ser el verdadero Egipto de los faraones. Con que Proyas nos muestre algo remotamente parecido, yo me doy con un canto en los dientes. Pero me da que no va a ser así. Me fastidia un poco que con la cantidad de temas interesantes que hay en la historia del Antiguo Egipto y sus leyendas, el cine siempre se fije en los mismos: Cleopatra, la maldición de la momia, los hebreos en Egipto y poco más. Por ejemplo, la herejía atoniana daría mucho jugo, y que yo sepa, sólo se han hecho Sinhué el Egipcio y Nefertiti, reina del Nilo, que son entretenidas, pero que no profundizan nada en la historia y los personajes. O historias de faraones guerreros, como Ramsés II o Tuthmosis III (el Napoleón de Egipto), de donde se podrían sacar estupendas películas épicas. O la conjura de harén que quizá acabó con la vida de Ramsés III, que se podría enfocar de una manera casi policíaca. O Hatshepsut, una reina que se hizo con el poder y gobernó como un hombre durante veinte años.